lunes, 6 de julio de 2015

¿INDIFERENTE, CÍNICO O MALVADO?

LA GUILLOTINA
LIC. JAVIER DURÁN

¿INDIFERENTE, CÍNICO O MALVADO?


Esta reflexión aplica tanto para nosotros los ciudadanos, como para nuestras queridas autoridades.

Dos hermanos, por desacuerdos que tuvieron con las grandes posesiones de ganado y trabajadores que tenían, decidieron que lo mejor era separarse. El mayor, eligió la parte alta de las tierras que poseían (colina), el menor, se quedó en el valle, en la ladera.

1.- En cierta ocasión, el hermano mayor desde las altura se dio cuenta que unos delincuentes iban llegando a la propiedad donde se encontraba su hermano. En lugar de hacer algo para avisarle, se quedó observando todo lo que los delincuentes hicieron: robaron el ganado de su hermano, mataron a sus trabajadores y quemaron las casas donde estos vivían.

Cruzar los brazos ante el sufrimiento de su hermano, se llama indiferencia.

2.- Lo peor de este acontecimiento, es que ante el sufrimiento del hermano menor, su hermano no solamente cruzó los brazos para mirar todo lo que sufría, sino que además de burlaba de él. Pensaba que si su hermano sufría, bien merecido se lo tenía.

Burlarse de la desgracia ajena es cinismo.

 3.- Queriendo sacar “raja” de este lamentable sufrimiento de su hermano, el hermano mayor bajó con sus trabajadores y empieza a llevarse algunas cosas que eran propiedad de su hermano y a las personas que se habían escondido para salvar sus vidas, los denunciaba con el enemigo, ya que su idea era quedarse con todo lo que había quedado.

Sacar provecho de la desgracia ajena (hacer leña del árbol caído), es de malvados.

¿Cuál de estas características vemos a diario en las personas con la que tenemos que convivir?

¿Cuáles de estas tres acciones lamentables es la que más ponen en práctica nuestras autoridades cuando un ciudadano anhela tener buena salud, alimentación de calidad y mejores servicios públicos?

En el ámbito personal, hemos visto como hay personas que se alegran con el sufrimiento ajeno. Gozan con la desgracia de otro. El caso más significativo de esto, que pinta al ser humano tal como es, sin máscara y sin una pizca de compasión es lo sucedido a Jonathan Lora.

Desde que perdió su libertad, hemos visto como ha sido abandonado a su suerte por los que se decían sus amigos y hasta lo arengaban para que siguiera con sus publicaciones en contra del gobierno por las redes sociales.

Abandonado por sus empleadores, entre los cuales se encuentra el mismo alcalde de Tepic, Doctor Leopoldo Domínguez.

Jonathan ha sido vilipendiado, atacado, acusado incluso de poner en riesgo la estabilidad del orbe mundial. Sus “enemigos” políticos, no solamente han cruzado los brazos para mirar como sufre en una celda fría del penal Venustiano Carranza, sino que además, se burlan de él y han hecho “sorna” de su desgracia.

De la burla de las autoridades ante las necesidades de la sociedad, es el pan nuestro de cada día. Hospital General sin medicamentos ni camas para atender a los cientos de enfermos que llegan a diario de todo el estado.

Días, semanas y meses sin que caiga agua en miles de hogares de esta ciudad capital y sin que la recolección de la basura sea una buena costumbre.

Camiones que cobran 6 pesos cuando se suponen deberían cobrar 5, por lo viejo y semidestruidos que están.

Escasez de empleos bien pagados y miles de personas deambulando tratando de encontrar la manera de llevar un pedazo de pan a sus casas.

En fin, estamos mal y no vemos que las cosas mejores.

Mi correo: guillotinakora@yahoo.com.mx