jueves, 12 de octubre de 2017

"Visitas inesperadas"


JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"Visitas inesperadas" 


Estaba pensando (que presumido) que a la mayoría de personas nos gustan mucho las sorpresas, bueno al menos las que nos causan un gusto o un placer, porque se debe reconocer que también hay sorpresas desagradables y esas no quisiéramos que llegaran a nosotros. Este artículo no versa sobre el tema de las sorpresas ni nada por el estilo. Ni daré explicación alguna sobre el significado del término. Vino a mi mente simplemente porque el día de hoy, seis de octubre, en la Secretaría de Obras Públicas del estado (SOP), dependencia en la que trabajo, tuvimos la sorpresa de ser visitados por el mismísimo Antonio Echevarría García, Gobernador Constitucional del Estado de Nayarit.

Habrían pasado dos horas desde que llegué a la oficina. En una de las tantas veces que voy y vengo por el pasillo principal de mi dependencia, observé que la entrada estaba atestada de periodistas. Algunos que yo conocía y otros que sabía que eran de prensa porque traían sus cámaras al hombro, sus grabadoras preparadas y sus plumas en ristre.

Era evidente que algo fuera de lo normal estaba a punto de suceder en mi secretaría. No tardé mucho en saber de qué se trataba. Los rumores corren con exacerbada velocidad y más en los pasillos. Me enteraba que el gobernador del estado haría una visita a las instalaciones de SOP. El periodista Ricardo Herrera, conductor del programa  “Meganoticias”, me lo confirmó en una breve y eventual charla que sostuvimos cerca de la entrada principal de la secretaría.

De por sí era ya una sorpresa  agradable que un gobernador visitara las instalaciones de SOP, pero fue aún más sorprendente que dedicara dos horas de su valioso tiempo a recorrer las oficinas administrativas, talleres, almacenes y el laboratorio. Creo que es un suceso inédito en la historia de esta dependencia. En el tiempo que llevo laborando ahí, quince y medio años, no recuerdo que un gobernador visitara la secretaría. Para saber si eso pasó en tiempos más remotos, pues habría que preguntar a los jubilados.

No es que este hecho sea algo sobresaliente por sí mismo, porque creo que debiera ser una práctica institucional obligatoria. Lo destacado del hecho es por el considerable abandono en que se le ha tenido por tantos años. Otro punto a subrayar es la forma en que se dio esa visita. Más allá que pudiera tratarse de una acción planeada, sustentada en una logística y un formato preparados con toda previsión, los momentos y las acciones ejecutadas se auto fortalecieron debido a la emotividad con la que respondimos los visitados al caballero que nos pasó a saludar.  Aclaro que uso esté término de caballero no con la idea de ser peyorativo y que el término tienda a mostrar una especie de género natural o designación casual de la persona, sino que uso el término tal cual lo prescribe el “Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española” en su tercera acepción: “Hombre que se comporta con distinción, nobleza y generosidad”.

De la sorpresa pasamos al disfrute de aquella cortesía mostrada por el joven mandatario. Fue realmente emocionante verlo entrar a saludar y platicar brevemente con el personal de las distintas direcciones de la dependencia. Se dio este sorpresivo evento en un marco de espontaneidad. Los empleados de esa dependencia nos sentimos en confianza para saludarlo, comentarle algo, o incluso hacer algunas peticiones para subsanar carencias críticas de determinadas áreas. No lo sentí como un acto de talante político y eso es ya un alivio. De verdad sentí el acercamiento natural del patrón que quiere saber el estado de las cosas. Hubo sonrisas, apretones de mano, abrazos y fotos, muchas fotos. La mayoría quería tener un recuerdo gráfico de esos momentos extraordinarios. Agucé mi capacidad de percepción y pude darme cuenta que la gente sonreía y que había brillo en sus ojos, seguramente asomaba a ellos la luz de la esperanza, la ilusión de mejores momentos y mejores tratos.

No puedo dejar de lado al Arquitecto Ricardo Rincón Yescas, el titular de la SOP, que en todo momento y tal como debe ser, acompañó al ejecutivo en su improvisado itinerario por oficinas, espacios, pasillos y almacenes. Mostró sin duda el lado humano que siempre anhelamos encontrar en un funcionario. Su sencillez y amabilidad encuadran a la perfección con el estilo y el trato que prometió instaurar Toño Echevarría en este gobierno. Cada vez me convenzo más que nuestro secretario hará un gran trabajo en esta encomienda. Por lo menos, tengo una buena impresión de él en las pocas veces en que he podido plantearle algún asunto laboral de mis representados. Se ha ganado mi confianza porque he visto su interés de resolver de manera paulatina las prioridades de la secretaría y sus trabajadores.

Tuve la oportunidad de platicar algunas cosas con el gobernador. Cosas rápidas y pequeñas pero muy importantes. Me sentí muy satisfecho de ver el concepto que tiene de los trabajadores sutsemistas y de su dirigencia. Reiteró la gran confianza que tiene en que se sacará adelante el derruido gobierno que le heredaron. Nunca se apartó de la necesidad de caminar juntos en este reto descomunal. Funcionarios y trabajadores, haciendo el mejor esfuerzo, Aportando sus aptitudes y sus actitudes en pro de una administración eficiente y eficaz, pero sobre todo honesta y con rostro humano, como antípoda de la simulación, la corrupción, el cinismo y el “valemadrismo” del gobierno anterior que dejó una estela de inconformidad, resentimiento social, sangre, humillación, pobreza e ignominia.

Hubo varios detalles que me agradaron de esta sorpresiva aparición del gobernador en SOP. Uno de ellos es que sin previo aviso y sin presión alguna, éste se subió a la caja de una destartalada camioneta pick up del área de maquinaria y desde ahí, a pleno rayo del sol, envió un mensaje, un mini discurso que, más que apoyarse en términos retóricos, pareció un diálogo sincero con las decenas de trabajadores que estábamos escuchándolo.

Que sucederá después, no lo sé. Pero si puedo decir en este momento que fue un hecho inusitado tener al gobernador paseando por las ruinas de secretaría que tenemos. Desde mi punto de vista es un mensaje alentador por más que las gentes que nunca les das gusto digan que “bla, bla, bla”, “que por qué no esto y por qué no lo otro”. Nunca falta la gente que siempre está en contra de todo y a favor de nada. Por mi experiencia como trabajador sindicalizado por supuesto que tengo mis dudas, pero también tengo mucha más confianza que ayer. Como periodista pues siempre hay la oportunidad de resarcir una opinión o una equivocación, cómo escritor es llenarte de nuevas vivencias que son insumos importantes para nuevas historias. Pero esta vez, como representante de mis compañeros trabajadores de SOP, como parte de una organización sindical que ha demostrado de manera histórica su significado dentro del contexto mundial de la lucha por la reivindicación de la clase trabajadora, que ha llegado al extremo del esfuerzo y el sacrificio por la consecución de la justicia social, puedo decir que sí creo en esta administración que apenas arranca, creo en la unidad y el respeto que hasta ahora se le ha brindado al SUTSEM y a su dirigencia, creo que deben llegar nuevos aires, nueva ilusión y tiempos mejores para las familias nayaritas. Además, siempre hay emoción cuando suceden las visitas inesperadas.

RECIBAN UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA PRÓXIMA SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS AL CORREO: elizondojm@hotmail.com .- MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.