*UN
HURACÁN EN EL GOLFO DE MÉXICO Y OTRO EN EL OCÉANO PACÍFICO
PEPE RIM / Periodismo Nayarita
Tepic, Nay; sept 30, 2013.- Por la televisión nos hemos enterado de los
daños que hace una semana causaron los elementos naturales y que por cierto,
difíciles de predecir con tiempo suficiente para realizar las evacuaciones de
la zona en que se supone será el lugar de impacto, en el caso de los huracanes,
pero además de eso, es muy poco el caso que hacemos a las medidas preventivas
que transmiten los medios de
comunicación y las instituciones de protección civil y que pudieran atenuar un
poco los efectos de los mismos; En la
pintada todo transcurría casi normal, eran días nublados y con algo de calor,
pues se suponía que ya se terminaba el verano y por lo tanto serian las últimas
lluvias y se encontraba toda la gente dedicada a sus actividades cotidianas, de
repente el aire que fluía lentamente
comenzó a arreciar y a hacer que los tendidos de los cables de alta tensión y
alumbrado público silbaran con fuerza, se escucharon truenos de los rayos y se dejó
sentir la lluvia, que en forma de remolinos sacudía los árboles y empapaba el
terreno e incrementaba el caudal de los arroyos y ríos y aunque se escuchaban
las medidas de seguridad que se debían de tomar, poco caso se les hacía, pues se pensaba que
sería solo un instante y pasaría, ya que en otras ocasiones lo habían padecido,
cierto; pero de repente se incrementó la
lluvia, los ríos bramaban, rujian y arrasaban con todo cuanto a su paso se
encontraba, de pronto se escuchó un estruendo en la montaña y ésta, se desgajó por la gran cantidad de agua que
contenía la tierra; las rocas, el lodo y
los arboles que arrastraba, cubrían las casas que estaban en la zona baja, con todo y personas
que se encontraban en ellas; algunas
personas que fueron agraciadas al no sufrir daños físicos, les gritaban a los
pobladores que se salieran que el cerro se había tronado y a continuación se dieron a la tarea de auxiliar y ayudar a la
población en general, sin embargo no era suficiente, el daño era mayúsculo y no
solo en esa región, ya que los elementos naturales Ingrid y Manuel , afectaron
tanto la zona del golfo de México, como la costa del Océano Pacífico, desde el
estado de Tabasco hasta Sinaloa en la parte norte de nuestro país, dejando
muerte y desolación por todos lados.
Aunque los equipos de rescate, el Ejército, la Marina, los equipos de
protección civil, población en general y
sus gobiernos trabajan arduamente para devolverles la tranquilidad, es
conveniente estar siempre atentos y unidos, ya que esto requiere de mucha
unidad y trabajo de todos los mexicanos.
Hoy
solo nos resta el solidarizarnos con nuestros hermanos afectados en las diferentes
partes de la República apoyarlos desde nuestros lugares de origen, enviándoles
un poco, de lo que tenemos y decirles que mucha fortaleza ante los siniestros y
que no se desesperen, que no se encuentran solos, que México entero los apoya.
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