JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / Periodismo Nayarita
"75º Aniversario del S.U.T.S.E.M"
Cuando
arribamos, mi hijo, mi esposa y yo, el lugar aún no terminaba de llenarse. Se
podían distinguir algunos espacios en varios sitios del inmenso salón de usos
múltiples de La Cantera, lo cual me pareció muy raro, ya que el tráfico
moderado en la zona permitió un arribo muy accesible. Seguramente sería que aún
no llegaban algunas delegaciones foráneas, pensé y acerté.
Caras
conocidas por todos lados. Daba gusto ver que en la mayoría se asomaba una
sonrisa, cosa que le daba un toque prometedor al evento. Se veía mucha
disposición en la mayoría de los participantes.
Se
podía distinguir a los grupos de trabajadores de las distintas dependencias que
como cada año sucede, se organizan para celebrar con una buena dotación de
comida, botanas y bebidas. No importa lo que lleven, ni la cantidad ni la
variedad, lo que verdaderamente vale la pena es el entusiasmo con el que se
convive.
Si
consideramos la situación actual por la que pasa nuestra organización ante los
grotescos embates del gobierno estatal, la indebida intromisión en su autonomía
y sus aviesas estrategias "legaloides" para confundir y presionar a
los trabajadores buscando de manera insidiosa la división, a pesar de todo eso,
sinceramente no fue nada de extrañar la ausencia del gobernador quien se limitó
a publicar un mensaje de felicitación a los burócratas en su muro de Facebook, al
que nadie le dio importancia.
Pero
mejor volvamos al festejo que es a lo que decidí dedicar el espacio de esta
semana. Me parece que es muy importante este gran evento. Evidentemente me
refiero a su significado, a su simbolismo.
Desde
mi punto de vista, este festejo del "Día del Burócrata" tiene un alto
contenido histórico y no es sólo un grupo de trabajadores que se reúnen a beber
y a bailar, además de la esperanza de llevarse un buen regalo. Este día, el 21
de mayo, marca el arribo a tres cuartos de siglo de existencia de la
organización más sólida y representativa de la lucha sindical en el estado.
Setenta y cinco años se dicen rápido, pero para llegar a ellos, se han tenido
que sufrir las vicisitudes propias de una clase trabajadora que lucha por
alcanzar condiciones de vida más dignas. Una organización que pugna por
recuperar la dignidad en el trabajo, las prestaciones alcanzadas que a diario son
regateadas por los malos gobiernos al servicio del poder económico y la
corrupción.
Es muy
cómodo llegar a disfrutar de esas prestaciones que otorga el sindicato, incluso
pretender más y más, pero lo que resulta indispensable es que nos demos cuenta
qué tanto hacemos para merecer esos beneficios. Los invito a pensar en quien
tuvo que dar su sudor y sus lágrimas para que esto fuera una realidad, quien ofrendó
su esfuerzo, quien aportó el tiempo y la vida como insumos para tejer la
grandeza del S.U.T.S.E.M. en todos estos años. En esos sencillos
cuestionamientos descansa la reflexión de lo que significa esta celebración. Por
supuesto que sí hay que celebrar, hay que sentir felicidad, alegría por el
evento, pero que esa pasión que despierta la convivencia, ese ánimo que alienta
y fortalece, se convierta en solidaridad y en compromiso de unidad en torno a
nuestra dirigencia, cuyo liderazgo a cargo de Águeda Galicia está más que
probado en disímiles situaciones, en las buenas y en las malas. Esta unidad a
la que hago referencia es el único antídoto poderoso en contra del despotismo,
la intromisión y la corrupción de la actual administración.
Debemos
reconocer que esta agresividad furiosa en contra de la clase trabajadora y el
sindicalismo, no es privativo de nuestra entidad, la campaña de desprestigio y
desinformación, los intentos por dividir a los correligionarios de Águeda
Galicia por parte de Roberto Sandoval y su equipo, no son circunstanciales, no
son eventuales. Al contrario, forman parte de un bien maquinado proyecto transexenal
de alto nivel, para el desmantelamiento del sindicalismo y la seguridad social
en México, así como otras bajezas para despojar a los mexicanos de su
patrimonio y vender al país en un plazo perentorio al 2030. En otras palabras,
nada es aislado, todo tiene una razón y un fondo negro, perverso.
Volviendo
al festejo, pues que decir, me pareció muy agradable, buena organización, buen
ambiente y muchos regalos. Una ceremonia sencilla, emotiva, auténtica, sin
poses, ni excentricidades. Digna celebración de los setenta y cinco años de
vida del S.U.T.S.E.M.
De los invitados
especiales, pues la nota importante la dio el Dr. Polo Domínguez, Presidente
Municipal de Tepic, quien ha mantenido una actitud conciliadora con los
trabajadores de base y con la dirigencia sindical. Hizo, en su intervención
retórica, un breve resumen de los pagos que ha realizado de adeudos heredados
por el tristemente célebre "Toro" González Curiel y otro presidente que
le antecedió cuyo nombre no quiero decir pero usa sombrero cotidianamente. Coincidió
con el comentario de Águeda Galicia en el sentido de que el gobierno "los
trae en chinga" (sic). A pesar de ello tanto el ayuntamiento como el
sindicato comparten la seguridad de que saldrán adelante en sus propósitos. Por
otro lado, de nuevo el S.U.T.S.E.M. se vio cobijado por las organizaciones
hermanas de la república mexicana, asistiendo representaciones de varias
entidades federativas como Jalisco, Chiapas, Querétaro, Michoacán, Zacatecas,
Estado de México e Hidalgo, entre otras. También se apreció la pluralidad al
tener como invitados a la mayoría de candidatos y candidatas a las diputaciones
federales. Los que recuerdo haber visto fueron del PAN, Movimiento Ciudadano,
PANAL y Encuentro Social. Del PRI ni sus luces. ¿Qué raro, no?
Noche
redonda descubrir que la banda sorpresa sería la internacional Sonora Santanera.
Quizá a muchas personas no les guste y prefieran una de esas bandas
"chacalosas" pero, con todo respeto, la Santanera "se cuece
aparte", ni crean que es de gratis una trayectoria de sesenta años, con
innumerables éxitos, giras en el extranjero, conciertos, teatro, televisión y
participación en muchas películas mexicanas. Para mi esposa y para mí fue el
marco ideal para celebrar, justo en esa fecha, el inicio de nuestro noviazgo
que pocos meses después se convirtió en un matrimonio que está por cumplir los veintitrés años de feliz existencia.
Así que
fue un buen día, con muchos motivos para celebrar, incluso por si no fuera
suficiente mi esposa tuvo su regalo del sorteo ganándose una sala. Así que
aprovecho este espacio para felicitar a los compañeros y compañeras que
tuvieron la fortuna de llevarse algo a casa. Muy especialmente a mi entrañable
amigo y compañero comunicador, con quien compartí el pan y la sal en nuestro
festejo, Don José Altamirano, quien tuvo la suerte de llevarse el premio mayor
del sorteo, el automóvil "Spark". No cabe duda que estuve cerca de la
fortuna ya que en mi mesa, a mi diestra, tuve todo el tiempo con este
afortunado ganador. Felicidades amigo mío.
A los
que, como yo, no tuvimos suerte esta vez, decirles que confíen en su buena
estrella, que la oportunidad se presenta cuando menos se le espera, a lo mejor
el próximo año nos toca. Por ahora, deseo para toda la comunidad sutsemista,
que el futuro se vista de gala y les regale con generosidad sus dones más
preciados. ¡Felicidades, por estos primeros 75 años! ¡Yo soy S.U.T.S.E.M.!
RECIBAN
UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA PRÓXIMA SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS
AL CORREO: elizondojm@hotmail.com .-
MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.
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