No Tiene la Culpa el Indio

JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / Periodismo Nayarita

Tepic, Nay; feb 12, 2014.-  Creo que a todos los que tenemos la oportunidad de escribir en algún medio de comunicación, nos gustaría muchas veces comentar sobre cosas agradables, sucesos fastuosos o buenas noticias. A mi me gustaría poder darles buenas nuevas a mis amables lectores, decirles por ejemplo que este año será económicamente maravilloso, que no escaseará el empleo, que la gasolina y el gas al fin bajarán su precio y cosas por el estilo. Pero, desgraciadamente las buenas noticias están cada vez más escasas.

Revisas el entorno local, volteas de un lado a otro y sólo ves problemas y más problemas. Te acuestas con la esperanza de un mejor mañana y te despiertas con la novedad de que ya existe un nuevo impuesto que pagar, que ya reformaron algo o que ya se aliaron los justos con los pecadores. Sales a la calle y te encuentras con nuevas inconformidades sociales provocadas por la negligencia e ineptitud de algunos presidentes municipales que tienen en crisis a cientos de familias cuya estabilidad y manutención básica dependen del sueldo y prestaciones de esos trabajadores. Ante esas circunstancias éstos se ven en la necesidad de realizar movilizaciones y paros laborales como los que recientemente se han llevado a cabo en las presidencias municipales de Tecuala, Tepic y Tuxpan. En varios ayuntamientos del estado les siguen debiendo sueldos y algunas prestaciones del año anterior a los trabajadores municipales, principalmente a los sindicalizados pero también a algunos que no lo son, incluso a los policías. La única excepción a esta situación parece ser el equipo de colaboradores de primer nivel y los incondicionales de los ediles referidos quienes cobran sus jugosas quincenas y compensaciones puntualmente.

La ciudadanía está cada vez más consciente, por lo mismo más cansada, de ver la forma tan cínica como algunos presidentes municipales y sus séquitos administran el poder a favor de unos cuantos. Existe ya un hartazgo social por la impunidad y desvergüenza con que le meten mano al erario para propósitos personales.

Yo creo que muchos ciudadanos no se percataban de la verdadera situación que guardan los ayuntamientos, en parte porque han perdido el interés en ello, pero también debido a la carencia de una prensa imparcial que informe a la sociedad de manera profesional, a la falta de un periodismo que esté atento a recoger la opinión de los protagonistas y que, con conocimiento de causa, opine y critique las acciones indebidas y las trasgresiones a la ley que se dan frente a los ojos del pueblo. Es necesario que existan periodistas comprometidos con la verdad que ofrezcan a los ciudadanos la versión objetiva de las cosas, que les digan el por qué los trabajadores se manifiestan y paran labores, decirles que están peleando por recuperar sus derechos de salario y prestaciones que de manera ilegal y prepotente les ha regateado su patrón, derechos que están consagrados en un convenio colectivo laboral que es un documento oficial, institucional, que no importa si lo firmó "El Toro" o "El Gallo" (Ups, esto ya parece granja) sino que se debe respetar porque se firmó con la institución, con la persona moral no con el individuo, la persona física, zutano o mengano.

He sentido náuseas al leer un artículo acerca de una de estas movilizaciones realizadas por los trabajadores. Este bodrio señala que las acciones de los manifestantes son ilegales, que son merecedores de cárcel "por violentar las leyes penales, laborales y municipales, al secuestrar el edificio del Palacio de Gobierno...(sic), en otras líneas califica dichas acciones como un "paro loco de labores" pide se les descuente de su salario el tiempo no laborado, dice además, entre otras linduras, que estas acciones dañan al público y a los demás funcionarios municipales, etcétera, pero en ningún momento menciona una palabra que tuviera que ver con las motivaciones y la opinión de la otra parte, es decir no incluye en su nota la versión de los trabajadores paristas, no parece el escrito de un periodista, más bien da la impresión de que el que escribió esa nota fuera el abogado del presidente municipal incumplido o en su defecto su director de comunicación social.

Lo anterior suele pasar, me refiero a que una cosa es lo que dice la prensa y otra muy distinta lo que sucede en la vida real. Por ejemplo, he sabido que el Ayuntamiento de mi querido Tecuala, recibe reconocimientos como el "Premio Nacional al Desarrollo Municipal" cuya metodología se basa en la planeación estratégica y la mejora continua de la calidad de vida de la población (?) y en demostrar la eficiencia y buena calidad de los servicios y obras públicas (?) además de muchos otros indicadores en los que quiero suponer deben estar considerados el saneamiento de sus finanzas públicas así como la correcta y oportuna remuneración de sus trabajadores municipales.

Desde mi punto de vista, fundamentado en vivencias personales y la opinión directa de muchas personas del municipio con las que tengo oportunidad frecuente de conversar, no existe congruencia con la supuesta meritoria marcha de la actual administración municipal y los relucientes galardones recibidos a través del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (INAFED) mediante "Agenda desde lo local" que es una metodología (cuestionarios) para diagnosticar la situación en que se encuentran los municipios en cuanto a desarrollo local, porque por muy aprobatorias que sean estas calificaciones la realidad que importa es la que se vive en carne propia, la que se sufre o se disfruta. Al final, la calificación que vale es la que otorga el pueblo.

Yo pienso en esos premios cuando llego a mi rancho y al entroncar el Boulevard Colosio, una de las vías principales, empiezo a zarandearme como si tuviera el mal de San Vito debido a los enormes zanjones que tiene ese acceso, así está también la entrada principal llena de cráteres y muchas calles en pésimas condiciones. Pienso en esos premios cuando me dicen las personas que les falta agua y drenaje sanitario y el flamante gabinete en viajes nacionales e internacionales de “trabajo”, cuando veo los paros por falta de pago a los trabajadores, cuando los policías se manifiestan y hacen paros por falta de salarios, deudas añejas, carencia de equipo, armamento y municiones. Pienso en esos premios cuando veo a funcionarios que llegaron en bicicleta y ahora queman llanta en buenas camionetas, cuando me entero de las propiedades que han adquirido los corruptos y corruptas (igualdad de género), cuando cierran temprano los comercios acreditados de vinos y licores, pero dejan abiertos los depósitos del mandamás. Pienso en esos premios cuando el ayuntamiento parece agencia de colocación de familiares debido al nepotismo impuesto por el edil y el matriarcado de la "Señora de los Dineros" y cuando escucho, como rumor público, la pésima opinión que la ciudadanía tiene de la reputación personal del presidente, que lo tilda de mentiroso, irresponsable, mujeriego y otras cosas más. Pero en fin como dice el refrán: NO TIENE LA CULPA EL INDIO.

RECIBAN UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA PRÓXIMA SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS AL CORREO: elizondojm@hotmail.com - MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.