LUCAS
MEZA GUZMÁN y LUDVICK LÓPEZ USCANGA / Periodismo Nayarita
Tepic,
Nay; oct 12.- Desde
la antigüedad se ha considerado al ave como una criatura sagrada, símbolo de
autoridad y fuerza, utilizada por diferentes civilizaciones a través del a
historia para diferenciar lo sublime de lo pagano… Por la misma razón de
belleza y singularidad existen personas
que se dedican a mercar con ellas, sacándolas de sus hábitats y llevándoles a
las ciudades, bajo los cuidados de personajes excéntricos y muchas veces irresponsables
en sus cuidados.
Diversos organismos
internacionales se han encargado de la conservación de estos seres, una de las
medidas incrementadas es la creación de espacios controlados donde estas
especies pueden vivir cautivas permanentemente pero dando prioridad a sus
necesidades naturales y brindándoles de un ambiente agradable y protegido,
conocidos comúnmente como “Aviarios”.
En México, la secretaría
encargada de estos temas es la SEMARNAT (Secretaría de Medio Ambiente y
Recursos Naturales), propiamente la PROFEPA que es la Procuraduría Federal de
Protección al Ambiente, gracias a esto nuestro estado cuenta con un Aviario
importante ubicado en el interior de la Alameda, colindando con las calles
Allende y Laureles y Góngora.
El aviario fue construido e
inaugurado en el año de 1987 bajo el gobierno estatal de Celso Humberto Delgado
Ramírez para la protección de las aves decomisadas a vendedores ilegales con la
ayuda de la SEDUE (Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología) lo que ahora se
conoce como PROFEPA.
En 1994 pasó a
responsabilidad del ayuntamiento municipal, iniciando solamente con un trabajador, actualmente son cuatro los que
colaboran en este lugar, principalmente y desde 1968 la encargada es la Sra.
Tezzi Cabazanni Camacho, cuidadora de aves autónoma y sensible a sus querellas,
ella recuerda los gobiernos pasados y el apoyo que se ha ido brindando a este
lugar y su propósito, hace mención de las autoridades que más han poyado y las
que le han quitado casi por completo la ayuda sin que se haga gran alboroto.
Patricia Ibarra Pérez, Jessica
Judith López González y Germán Rodríguez Valdivia son los nuevos cuidadores del lugar, aunque no hay quién cuide en las
noches porque el horario de trabajo es de 8:00 a.m. a 2:00p.m.
En cuanto al dinero y como
dependen directamente del ayuntamiento de Tepic se les retribuye de manera
fija, con cheques, aunque para el mantenimiento de los insumos dedicados a las
aves el pago viene en efectivo, teniendo los cuidadores que ir a comprar las
frutas, medicinas y demás alimentos devolviendo facturas para tener las cuentas
en regla; en general no se pide ayuda monetaria a los visitantes solo en los
casos donde se llevan más de 10 plumas se les indica que deben dejar un líquido
especial para desinfectar los alimentos de las aves.
El parque no necesita
mantenimiento especial, se barre y se limpia como cualquier otra casa, pero
esto solo es en cuanto a limpieza porque en cuanto a estructura vemos que la
pintura data de hace muchos gobiernos, las palmas utilizadas para los techos
cada día tienen hoyos nuevos y las rejas no tardarán mucho en oxidarse.
El jefe directo del parque,
de aseo, ecología e imagen pública es el Ingeniero Adolfo Arturo Hernández
Guerrero a quien se informa todo lo que pasa en este santuario de criaturas
aladas.
Una de las principales
preocupaciones de los encargados es la falta de conocimiento por parte del
pueblo Nayarita sobre la existencia, ubicación y propósito de ese lugar,
haciendo notar que el número de visitantes ha disminuido considerablemente, y
aunque es difícil llevar la cuenta los cuidadores nos hablan de que el flujo de
personas ya no es el mismo.
Entre las aves que allí se
encuentran se ve a una pareja de chachalacas, una guacamaya con sus tres crías,
cinco periquitos Atoleros, dos Nanñandúes, 27 Montañeses, dos aguilillas, un
Harrys, una Colirufa, dos Patos Canadienses, incontables palomas habaneras, una
pareja de palomas ala gris, un gallo Polaco con tres gallinas ponedoras, un
gallo de pelea con sus dos gallinas, una espectacular Cacatúa de moño naranja
además de dos especies muy raras de aves que están en busca de pareja
apareable, un choncho y una ninfa.
Todos los días las aves son
alimentadas con una gran variedad de frutas,
verduras y cereales, especialmente les dan elote, mangos, plátanos, manzanas,
nueces, cacahuates, amaranto, tunas, aguacate, lechuga, etc.
Tezzi nos platica además de
los diversos cursos y talleres que fueron impartidos para el cuidado ambiental
cuando el aviario se veía como un buen sitio para pasear y conocer, terminando su
discurso con un gran “Queremos y necesitamos que se organicen de nuevo talleres
de educación ambiental”.