REDACCIÓN /
Periodismo Nayarita
México, D.F.; jul 14,
2014.-
Eloí Vázquez López, comisionado político
nacional del PRD, pidió se investigue por la FEPADE, la participación de Ulises Ruiz Ortiz, a través de su operador Bulmaro Rito Salinas,
experto en la implementación de prácticas antidemocráticas para favorecer a su
partido, por lo que su “colaboración” en las elecciones
celebradas el domingo pasado en Nayarit, donde imperó el acarreo,
la compra de votos y las amenazas a los simpatizantes opositores que desplegó
el Gobierno del Estado y el PRI en todo el territorio nayarita, no
es de extrañarse.
Semanas
antes de ser arrestado por el delito de peculado, el priista Bulmaro Rito
Salinas, realizó el trabajo que sabe hacer bien, el de operador electoral, es
decir, “mapache electoral”. En esta ocasión, cobijado por el gobernador de
Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, resuelto a
frenar, a como diera lugar el avance de la oposición de cara a las elecciones
celebradas el 6 de julio pasado, en donde por cierto, el PRI perdió la capital y otros municipios estratégicos.
Como
antecedente directo, El 2 de diciembre del 2013, Ulises Ruiz fue presentado
como el nuevo delegado del Comité Ejecutivo Nacional del PRI en Quintana Roo,
rindió protesta en la sede estatal del PRI en Chetumal, en ese momento, Pedro
Flota Alcocer dirigente estatal del PRI en Quintana Roo, mencionó que su
nombramiento fue “para consolidar la fuerza del partido y prepararse para el
próximo proceso electoral federal de 2015”, refrendando con ello, la fama que
ha mantenido el oaxaqueño al interior de su partido como uno de los más
eficaces mapaches electorales por 25 años, en este contexto, no es extraño que Rito
Salinas, uno de los operadores consentidos en el gobierno del oaxaqueño, se haya
ostentado en Tepic como subdelegado del Comité Ejecutivo Nacional en
Quintana Roo, por lo que muchas de las acciones de intimidación y uso
de armas, así como compra de votos, es perfectamente identificable cómo el
sello del ulisismo en la elección nayarita.
Por lo tanto, resulta deplorable que
el presidente del PRI, César Camacho Quiroz, ocupe a los ulisistas corruptos
cómo operadores electorales y les brinde además, protección del Gobierno
Federal a cambio de sus servicios. Por ello, la Procuraduría General de la
República está obligada a ampliar su investigación sin excluir a Ulises Ruiz de
responsabilidad. Había doce camionetas armadas con gente encapuchada como lo
denunciamos y documentamos, que golpeaban y amenazaban a los operadores
electorales del PAN y del PRD, contituyendo un delito federal. Detrás de ello,
está el tufo de la caravana de la muerte que URO implementó en 2006, y existen
resoluciones de la Suprema Corte de Justicia al respecto.
Por lo que la pregunta que todos nos
hacemos, concluyó Eloí Vázquez, es: ¿El PRI hará algo realmente con este tipo
de militantes, o continuará cobijando a sus “miembros destacados”, aprovechando su experiencia en prácticas de terrorismo de Estado para
beneficiarse electoralmente? ¿Es esto lo que le ofrece el PRI al
electorado en el 2015?