SAÚL ARMANDO LLAMAS
LÓPEZ / Periodismo Nayarita
Guadalajara,
Jal.- Leyendo una revista del Normalísimo que
pertenece al Órgano de Información de la Escuela Normal Superior de Nayarit
(Balance de una Administración 1993-1999), observe un artículo realizado por el
Mtro. José Luis Tovar Huerta, es destacado al recordar a un gran docente
nayarita, una vida dedicada a la educación y al deporte, como lo fue el Profr. Arnoldo Llamas Arroyo, de tal
forma que aprovechando que su gran diario circula por esas hermosas regiones de
Nayarit, le pido con todo respeto y atención, me publique el presente artículo,
en su gustado medio que dignamente dirige Usted.
25
de Abril de 1999, domingo por la tarde, una infausta noticia
corrió reguero de pólvora en Tepic y Bellavista Nayarit, al avisar que había
muerto el Profesor Arnoldo Llamas Arroyo,
a quien amigos y conocidos llamábamos con efecto el “Yoyo” apodo derivado de su nombre de pila.
Lo traicionó su corazón
cuando practicaba el deporte de sus amores, el futbol, jugando en Tepic, simplemente eso, este órgano vital que tantas
veces lo llevó a superar situaciones difíciles como deportistas y como hombre,
ya no pudo seguir el ritmo que Arnoldo le imponía y simplemente dijo ¡ Hasta
aquí !
Pero vayamos con calma
¿Quién fue Arnoldo Llamas Arroyo?, ¿Qué hizo durante su vida para haber hecho
tantos amigos?, ¿Por qué le teníamos respeto y admiración?, todas las preguntas
tienen su respuesta.
Arnoldo, segundo hijo
de José Llamas Sandoval y Candelaria Arroyo Ceceña (D.E.P.), una familia
humilde de cuatro hermanos, vio la primera luz de su existencia el 20 de mayo
de 1940, en la calle 1ro. de mayo conocida como La Cuadra, en Bellavista Nayarit, desde niño mostro grandes
cualidades como deportista y como estudiante. En la escuela primaria “Benito Juárez”,
1949-1955 siempre se distinguió por ser el alumno más brillante de su grupo y
eso lo dicen y reconocen quienes fueron sus compañeros de banquillo, sin temor
a equivocarme, ¿o no profe Elías Guzmán?, también a temprana edad se vio que
tenía enormes cualidades para los deportes, particularmente para el futbol y el
voleibol, junto con niños de su camada
en 1949-1950, fue pionero de los
Campeonatos infantiles
de futbol de barrios en su tierra natal, a los nueve años ya era la estrella
del grupo de “La Cuadra”, el famoso “Guadalajara”, equipo al que siempre quiso
y con el que siempre jugó en los torneos de barrios, que conquisto algunos
campeonatos.
Sus estudios de
secundaria y normal (1955-1961) los hizo en la ya desaparecida Escuela Normal
Rural de Jalisco, Nayarit (así con “J”, porque en aquella época así se escribía
ahora se hace con “X”), allí también se distinguió por su inteligencia, su
capacidad deportiva, pero sobre todo por su don de gentes, muchas veces se
integró como miembro de la escolta de la escuela y siempre formó parte de las
selecciones de futbol y voleibol de la normal.
Fue seleccionado para
los juegos nacionales de Escuelas Normales que se realizaron en San Diego,
Yucatán, San Marcos, Zac., Atequiza, Jal., y por supuesto, los que se
realizaron en Xalisco, Nayarit en 1959.
También fue integrante
del equipo de Bellavista de primera fuerza (máxima categoría de fútbol amateur
de la época) que resultó campeón imbatible durante tres temporadas consecutivas.
Arnoldo a los 19 años
fue llamado al Deportivo Tepic y jugó durante tres temporadas, siendo todavía
estudiante de la Normal y lo hizo como los grandes, ya que jugó tres temporadas
como interior izquierdo, en un partido en la ciudad de México, contra la UNAM, en la segunda división, él
metió un gol de cabeza que quedo impreso en el periódico deportivo “El Esto” (1967).
Por desgracia para el
futbol, pero para fortuna de la educación, a poco de terminar sus estudios de
profesor normalista, se retiró del futbol profesional en pleno apogeo y siendo
ya un ídolo, para dedicarse de lleno a la noble tarea de educar a la niñez
nayarita.
Inició su carrera como
maestro de primaria en los poblados de Caleras de Cofrado, Cordón del Jilguero
y Pimientillo. En 1964, siendo estudiante de la especialidad de Matemáticas en
la Escuela Superior de Nayarit, se incorporó como maestro de esa asignatura en
la Escuela Secundaria Federal “Manuel Ávila Camacho”, de Yahualica Jalisco, donde de inmediato se ganó el cariño
y respeto de maestros, alumnos y la gente del pueblo, haciendo lo mismo
posteriormente en Ameca Jalisco, donde se le reconoció por la comunidad por su
calidad humana, académica y deportiva.
Siempre dejó huella
imborrable en las escuelas que tuvieron el honor de contarlo entre sus
maestros. La última escuela secundaria en la que trabajó como catedrático, fue
la secundaria federal nº 2 de Tepic, donde como era su costumbre, hizo grandes
amigos entre los maestros, alumnos y padres de familia, hoy lo recuerdan con
admiración y respeto.
En 1988 se incorporó
como asesor técnico del departamento de secundarias generales en el Estado de
Nayarit y a partir de 1992 fungió como Jefe de Enseñanza de Matemáticas, puesto
que ocupó hasta su fallecimiento, se le recuerda como gran orientador de
maestros de su especialidad y como hombre de amplios conocimientos matemáticos.,
recuerdo que a veces dejaba de desayunar por realizar sus cálculos de algebra,
el cual le ocasionaban llamadas de atención de su esposa (Alicia).
Sus estudios de Licenciatura
y de Posgrado los hizo en esta E.N.S.N. (Escuela Normal Superior de Nayarit) y
se desempeño como catedrático de reconocida capacidad en la licenciatura de su
especialidad por muchos años (Matemáticas).
Le sobreviven su
esposa: Alicia Delgado, sus hermanos: Bertha, Saúl, Guadalupe, José, Milton y Zaida,
sus hijos: José Luis (Pepe), Sonia
Araceli, Norma Alicia, Carlos Adrian (El Tío), Arnoldo (El Jefe), Raúl Alonso (El Patrón) así como sobrinos: Saúl
(Yiyo), César, Carlos (Tito), Hugo, Perla, etc., y nietos: Arnoldo (Nono), Ashley, Brandon,
Daniel, Bertha, Alan y Jovany., así como
Bisnietos.
Recordándolo
con mucho afecto, que Dios lo tenga en su santa gloria y te bendiga por
siempre, con respeto y cariño, queda en su epitafio:
“Arnoldo fue: Un Gran Ser
Humano, Hijo, Hermano, Tío,
Amigo, Esposo y Padre,
Un Gran Deportista,
Un Gran Catedrático”.
¡Arnoldo Fue Grande!
1940-1999
Bellavista, Nayarit.
Descanse en paz.