domingo, 16 de julio de 2023

"La libertad de expresión está de luto"

 



JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"La libertad de expresión está de luto"


  El título de este comentario es absolutamente literal. Me refiero al infausto, inaceptable y doloroso asesinato de Luis Martín Sánchez Iñiguez, compañero periodista local y corresponsal en Tepic del periódico nacional “La Jornada”, acaecido en días pasados en esta capital nayarita.

 Por supuesto que causó revuelo la noticia cuando fue encontrado el cuerpo sin vida del colega periodista. Los malos presagios que estaban en la atmósfera social fueron comprobados el sábado 8 de julio. El escenario, un camino vecinal que va de “El Ahuacate” a “Huachines”, ambos poblados del municipio de Tepic. Su muerte se suma a la ya larga cadena de imperdonables crímenes que mantienen a México como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.

 Las reacciones se dejaron sentir como era lógico imaginar. La parte más sensible, además de la familia, fue el gremio periodístico que en buen número se manifestó frente al edificio sede del poder ejecutivo estatal. Las principales consignas fueron: “No se mata la verdad matando periodistas”. “No más periodistas asesinados” “Activar el mecanismo local de Protección a periodistas”. Lo mismo ocurrió en otras ciudades del país, como la ciudad de México, Guadalajara, Ciudad Juárez y Oaxaca, entre  muchas otras.

 La pregunta que todos nos hacemos es: ¿Habrá justicia en este caso?  La interrogante está fundamentada en la poca o nula resolución de casos de asesinatos de periodistas en todo el país. En ese sentido, no hay ninguna clase de exclusividad. Lo hemos visto a través del tiempo y la mayoría de casos han quedado como muestra fehaciente de la impunidad. ¿Será Nayarit la excepción a la regla?

 Cuando hablaba de reacciones me estaba refiriendo al total de ellas. A la múltiple gama de situaciones que se desprenden de un hecho tan vergonzoso como es el asesinato. En el caso de Martín, adquiere un viso muy particular porque se deja entrever que el móvil del o los homicidas sí está relacionado con el quehacer periodístico, con la publicación de hechos que se sustentan en una verdad, en exponer a la luz pública algún asunto que tiene particular importancia para la sociedad, dicho en otros términos sería lo que coloquialmente conocemos como “pisar callos”. Los aspectos derivados de la información que se tiene a la fecha de escribir este texto, están relacionados con “callar” a toda costa al periodista. Al parecer, él había recibido amenazas, además fue privado de su libertad y lo desapoderaron de su computadora, su teléfono celular, su credencial de periodista  y una memoria externa con información importante relacionada con su trabajo. Si esos no fueran elementos suficientes para sustentar una robusta línea de investigación, estarían también los mensajes amenazadores que dejaron adheridos al cadáver.

 ¿Cuáles fueron las reacciones de las autoridades? Al Fiscal General del Estado de Nayarit, Petronilo Díaz Ponce Medrano, se le ha visto muy activo en las ruedas de prensa y programas informativos  de radio y televisión. En alguno de ellos, le vi titubear al principio y recobrar su asidua seguridad después de un rato. Sin saber qué avances tienen las líneas de investigación que se están manejando en el caso de Martín Sánchez, me parece que el funcionario ha vendido la idea del optimismo, de la seguridad en los resultados, aunque no comprometió plazos, ni condiciones específicas, dijo que se encontrarán y castigarán a los culpables.

 Digamos que la fiscalía reaccionó con cierta agilidad y dejó sobre la mesa una esperanza y una sensación de control y eficiencia. También debemos considerar que existió en este caso un catalizador especial que prendió la mecha en el entorno y el panorama noticioso nacional. Varios medios nacionales de importancia se pronunciaron y presionaron la búsqueda de justicia. La inquietud y el revuelo causados fue importante, al grado que la misma organización de las Naciones Unidas (ONU) se pronunciara en este sentido en su portal de “Noticias ONU” (Mirada Global Historias Humanas) en el que aparece este encabezado en una noticia publicada con fecha 10 de julio de 2023: “El periodista Luis Martín Sánchez Íñiguez fue muerto en la ciudad de Tepic, una ciudad costera del Pacífico mexicano. Dos trabajadores de los medios de comunicación locales también se reportan desparecidos en la misma zona. La dependencia de Derechos Humanos de la ONU en México condena estos hechos y pide investigarlos a fondo”.

 Más adelante, en el texto de la noticia señala: “Las indagaciones deben tener como premisa central la labor periodística”. La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos condenó en los términos más enérgicos la desaparición y asesinato de Sánchez Íñiguez, que se añade a una serie de crímenes contra la prensa en México. Con el suyo, suman cuatro los periodistas asesinados en el país en lo que va del año. La Oficina de la ONU señaló que la Fiscalía debe considerar el trabajo periodístico de Sánchez Íñiguez como la principal línea de investigación.

 Se espera que las muestras de interés por parte de estas dependencias que protegen los derechos humanos, sean factor de incidencia en la búsqueda de justicia para este y otros homicidios de periodistas. Cabe señalar que, no obstante haberse instalado en este año el Sistema para la Protección de Personas Defensoras de Derechos y Periodistas, en la práctica no ha funcionado ni ha protegido a nadie del gremio.

 Se han dado casos de amenazas, intimidaciones, agresiones físicas y verbales a periodistas, mismas que han sido denunciadas ante las instancias estatales y federales competentes sin obtener ningún resultado, de donde se deduce que los protocolos y mecanismos de protección en Nayarit, han sido a la fecha tan solo una simulación. Es necesario que la sociedad y la opinión pública, local, nacional y mundial, conozcan a fondo esta historia. La auténtica narrativa, la peligrosa y, a veces letal, realidad histórica del periodismo. Es una tristeza y una sombría y permanente amenaza que el trabajo de informar sea una forma cotidiana de jugarse la vida. Desde esta modesta tribuna, pedimos en nombre propio y en el de todos los que formamos parte de este gremio: ¡Justicia para Martín!

RECIBAN UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA SIGUIENTE SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS AL CORREO: elizondojm@hotmail.com .- MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.