jueves, 9 de noviembre de 2017

"Sabia virtud de conocer el tiempo"


JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"Sabia virtud de conocer el tiempo"


Siguen transcurriendo los días. Hasta la fecha en que escribo este texto, son ya cuarenta y cinco, desde que el gobierno de Toño Echevarría García asumió su responsabilidad, misma que habrá de tener por los siguientes cuatro años.

Percibo en la sociedad que su gran ilusión empieza a tornarse en una especie de desesperanza. Eso no me parece que sea un buen síntoma para la tan esperada administración del cambio. De hecho hay opiniones bastante radicales en el sentido de que han iniciado mal desde la confección del gabinete. Particularmente hay denostaciones muy específicas para el Secretario General de Gobierno y el de Planeación, Programación y Presupuesto. Evidentemente estas críticas, de algunos sectores, se sustentan en las actuaciones que estos personajes del ámbito político tuvieron, el primero en el sector educativo y el segundo en su trabajo como presidente suplente de Polo Domínguez, hoy flamante jefe del congreso estatal.

Hay cierta razón en la ciudadanía, cuando quisiera ver de manera inmediata los resultados que espera. Ya les había comentado de las inmensas expectativas que se crearon respecto a este nuevo proyecto de gobierno, al grado que se le atribuyeron características mesiánicas, cosa que siempre me pareció fuera de todo razonamiento. Por supuesto que la sociedad en su conjunto, o los que le apostamos a esta fórmula, seguimos esperando esos resultados que yo creo que sí van a llegar.

Es entendible el desaliento de muchas personas, porque todos quisiéramos ver resueltos los problemas que más nos duelen. Pero también es cierto que es imposible hacerlo de la noche a la mañana. Se me hace muy difícil que esta administración pueda recomponer en un tiempo breve la catástrofe ocasionada por los “sombreristas” que se acaban de marchar. Pero también es cierto que no se les pide que resuelvan todo y de una vez. Se entiende que no es como una varita mágica que, al conjuro de un abracadabra, puede transformar un pestilente pantano en un paradisiaco oasis. Lo que se reclama de esta administración es que se aplique a resolver las prioridades que han sido más que ponderadas por la sociedad, tanto ahora que ya es una obligación atenderlas como mucho antes, al calor y al apasionamiento de una campaña política.

No se necesita ser un especialista en materia social o política para saber cuales son estas prioridades que urge resolver. Casi podría apostar que habría, como en las peleas de box, una decisión unánime en favor de abatir la inseguridad pública que nos mantiene prácticamente secuestrados. Es ese tema el que, desde la percepción social, empieza a convertirse en una anatema para este gobierno. Primero porque se esperaba que el cambio de gobierno trajera consigo la paz social. Segundo porque no hay que olvidar que es muy usual comparar las etapas gubernamentales a través de los números fríos de la estadística simple y, desafortunadamente para este gobierno, resulta altamente desventajosa la acumulación de cadáveres y hechos criminales en este mes y medio de aparente parvulez Toñista.

Es muy doloroso equivocarse en estas cuestiones, cuando le apuestas tu resto a algo. Yo sigo creyendo que no me equivoqué al confiar en esta opción y que debemos darles el beneficio de la duda, y considerar quizá, que hasta ahora sólo les podemos cuestionar su lentitud para reaccionar ante hechos evidentes que ameritan de ellos una decidida, contundente e inmediata respuesta.

Desde mi punto de vista es urgente que ya den muestras de cuál va a ser su línea de trabajo en relación con el combate a la delincuencia, y se dejen ver escenas reales de esfuerzo concreto y eficiente. Es tiempo también de que se dejen ver las primeras grandes acciones de justicia. Es inaplazable ya que se castigue a los principales corruptos de la administración pasada, y no sólo que se les encarcele sino que se les obligue a resarcir a las arcas del erario todo lo que se robaron. No es justo que el pueblo y la clase trabajadora se tengan que apretar más el cinturón mientras esos ladrones pasean su insultante impunidad frente a nosotros. En este sentido sólo basta que todos le recordemos a nuestro gobernador que esa fue quizá la más GRANDE promesa de campaña.

Confío que nuestro joven gobernante, habrá de asentar sus pies bien firmes en la tierra y no perderá la cordura y sencillez mostrada en campaña y en los primeros días de gobierno. También confío en que les recordará a sus secretarios y directores generales, el compromiso político y moral de apoyo para quienes lo llevaron al poder. En algunas dependencias hay ciertos directores que no han entendido esta parte del juego y ahora se hacen los desentendidos. Se entiende que muchos son empresarios y que sólo conocen ese sector y nada de los vericuetos del sector público y mucho menos de los códigos insondables del ámbito político. Afortunadamente no son la mayoría de este tipo. Es grato encontrar en muchos funcionarios de nuevo cuño, emergidos de las empresas privadas, la ecuanimidad de sondear los problemas, y tratar de comprender las causalidades de distintas problemáticas a las que tendrán que enfrentarse, sin golpear ni ofender la dignidad y el sentimiento de sus subordinados.

Es de reconocer la apertura y la ecuanimidad de muchos funcionarios que se acaban de estrenar en esta administración, sobre todo aquellos que han sido sensibles y respetuosos, condiciones que les ha dado calidad moral para equilibrar las relaciones laborales y tener mayor productividad y aceptación en sus puestos y, por supuesto, también voy a criticar a los que, escudados en la reorganización y la eficiencia, han usado la “violencia o rudeza innecesaria” contra los trabajadores que, los que conocen de fútbol americano, sabrán que eso se penaliza con quince yardas con primero y diez automático. Lo peor del caso es que hay algunos directores generales que no respetan o no concuerdan con la línea marcada por el gobernador y por su propio secretario, respecto al trato, al respeto, y a los compromisos adquiridos, no sé si no se dan cuenta de ello, o se la pasan por el arco del triunfo, lo cuál sería aún más grave. Ya veremos qué pasa más adelante con eso.

En resumen, siguen existiendo muchas expectativas de este gobierno, pero es indispensable que aceleren el paso. Debe atender y combatir la violencia, las ejecuciones, los "levantones", desapariciones forzadas, aclarar y castigar a los culpables de las narco fosas, etc. En cuanto a la realización de obras y acciones, sabemos que no hay presupuesto, y que aquellos “Bandidos de La Gente” se llevaron hasta el perico (sólo es una frase popular, se refiere a un "cotorro"). No dejaron ni para el papel sanitario. Razón de más para que se les castigue. Pero sí se puede avanzar en el aspecto de las denuncias administrativas, penales, juicios políticos y todo lo que proceda, porque si se solapa una vez más esta burla sangrienta de una administración corrupta como pocas, entonces sí podría vaticinar que toda esa simpatía y aceptación social para el gobernador, se vería muy mermada, incluso podría volverse contra él. Demos tiempo al tiempo.

RECIBAN UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA PRÓXIMA SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS AL CORREO: elizondojm@hotmail.com .- MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.