JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / Periodismo Nayarita
"A la marcha por la dignidad"
Recientemente
asistí a una reunión de trabajadores. No daré detalles porque no lo considero
necesario. Y esto no lo digo porque esa asamblea haya sido intrascendente o
porque quiera ser peyorativo sino porque sólo tomaré la parte que más me llamó
la atención.
Quizá
el hecho de estar en esa ocasión sólo con el carácter de invitado o testigo, me
dio la oportunidad de observar con mayor detenimiento algunas cosas. De lo que
analicé en esa experiencia intentaré dejarles aquí algunas ideas.
Para
empezar debo decir que a veces se tienen ideas que parecen ser muy lógicas pero
que luego te das cuenta que no lo son tanto. De verdad que esto no es un
divertido juego de palabras. Me estoy refiriendo a que tienes la percepción por
ejemplo que cierto grupo de trabajadores es muy homogéneo. Crees que todos
tienen las mismas características, los mismos problemas, las mismas actitudes.
Ante una premisa así no queda más que pensar que también será igual con los conflictos.
Mejor dicho te imaginas que un grupo así tan cohesionado, tan uniforme, tendrá
un solo problema, un mismo problema y no es así.
Te sorprende
darte cuenta que ni es uno el problema ni el grupo es tan unido como parece. Te
encuentras con que existen diversos problemas al interior de estos círculos de
trabajadores. Lo sorprendente no es que tengan problemas, puesto que en esta
administración estatal es raro quien no los tenga, sino que te percates que uno
de los problemas sea la existencia de algunos grupos antagónicos.
En el
análisis realizado se llegó a la conclusión de que la división existente,
insumo principal de los diversos problemas, no es otra cosa que el resultado de
una estrategia aplicada por el gobierno actual. Eso es justamente lo que éste
desea. Que los trabajadores se confronten, se ataquen unos a otros, que se
rompa la unidad y la solidaridad, binomio estrella del sindicalismo mexicano.
Después
de percibir una espesa apatía y una insultante falta de seriedad ante la
problemática actual por parte de muchos integrantes del grupo reunido, resulta
gratificante que después de un ejercicio casi espontáneo de reconocimiento de
culpas se llegara a una extremada yuxtaposición de propósitos e intenciones de
solución a los conflictos principales.
En este
sentido es importante destacar la sapiencia de quien representa los intereses
de los trabajadores sindicalizados al
servicio del estado. Después de escuchar con gran paciencia, incluso siendo tolerante
ante algunos exabruptos pero sin perder la autoridad de su investidura gremial,
dio una amplia explicación de la situación actual, un acertado y objetivo
diagnóstico del complicado momento histórico, político y social que se está
viviendo no sólo en el estado de Nayarit sino incluso en el panorama nacional y
mundial producto de la brutal embestida por parte de un rapaz ordenamiento
económico basado en el neoliberalismo.
Resultó
muy alentador constatar el efecto positivo de las palabras de la lideresa del
SUTSEM en ese colectivo, antes inquieto, bravo y altanero. Esa mezcla de
suavidad y seguridad, de comprensión y autoridad, de ternura y fortaleza en su
mensaje, produjo efectos casi mágicos. Me pareció de pronto ver una épica
escena donde una gigantesca serpiente de varias amenazadoras cabezas era congelada
y sumida en el control por un ademán o pase hipnótico de un poderoso alquimista
de la antigüedad.
Tuve
que girar varias veces mi cabeza para deshacer aquella visión esotérica y
regresar a la aplastante realidad de un entorno peligroso y apremiante. Me
trajo de vuelta a este mundo el peso de unas palabras cargadas de razón. La
contundencia de un mensaje que advierte del peligro y exhorta al despertar de
la conciencia. Me gustó lo que fue más un diálogo que un discurso. En parte
porque coincide en mucho con lo que yo pienso, con lo que yo creo, porque está
basado en datos reales y estadísticas recientes que incluso ya he comentado en
algunos artículos de este medio de comunicación.
Me
gustó ese mensaje, a veces como una plática a veces como una filípica, porque informa
y previene sobre la puesta en marcha de varias estrategias de la plutocracia
para apoderarse de todas las riquezas del país, entre ellas el famoso “México
2030.- Proyecto de Gran Visión”, que impulsó el gobierno de Felipe Calderón y
continúa a toda marcha con el presidente Peña Nieto, quién superará con mucha
facilidad a López de Santa Anna, nuestro mejor vendedor, como dijera el gran Óscar Chávez.
Hizo
también un recorrido por la política local, describiendo ampliamente y con
detalles la cadena de abusos y tropelías cometidos por la clase política actual
encabezada por el titular del ejecutivo estatal. La desmedida ambición que ha
llevado a un impune saqueo del dinero público.
El asqueroso enriquecimiento ilícito de muchos funcionarios de la actual
administración que sin disimulo alguno depredan el patrimonio de los nayaritas.
Lo más
importante de todo esto es que no se queda en la descripción de las causas de
la pobreza y el estancamiento económico sino que ofrece una propuesta para
contrarrestar esa aberración. Es una invitación a dejar la modorra y la apatía
social. Es un llamado a levantar la cabeza. Es un exhorto a socializar la lucha
sindical, a informar a la ciudadanía las razones de esta lucha. A romper los
viejos paradigmas de la política y reconstruir los cimientos de la democracia.
Una democracia ascendente, que dimane del pueblo, de las estructuras primarias
de la sociedad y no de la imposición descendente y arbitraria.
En fin,
esa reunión que hoy sirve de fuente, resultó ser toda una sacudida de cabeza. Por
eso quise traerla aquí sin señalamientos personales, sin reclamos ni
acusaciones. Quise comentarla de manera pedagógica, sin balconear ni a grupos
ni a sujetos. Compartirla con mis amables lectores como una especie de ejemplo
real sobre el cual se puede reflexionar sin mayor limitación que nuestra propia
conciencia. Espero que así como me pareció entender lo sucedido, así se
comprenda la verdadera esencia de esta lucha, en la que no sólo están de por
medio nuestros derechos laborales sino también nuestra dignidad.
RECIBAN
UN SALUDO AFECTUOSO.- LOS ESPERO LA PRÓXIMA SEMANA - COMENTARIOS Y SUGERENCIAS AL CORREO: elizondojm@hotmail.com .- MIEMBRO ACTIVO FRECONAY, A.C.