miércoles, 27 de mayo de 2020

"La solidaridad en la pandemia"



JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"La solidaridad en la pandemia"



El sol apenas se quitaba las lagañas cuando el buen amigo Julián Cedros salió de su domicilio. Trepó en su vehículo y, a toda velocidad, se dirigió en busca de su amigo Benito, quien le acompañaría a recoger algunos donativos para la cocina humanitaria en la que ambos colaboraban.

En pocos minutos se encontraba tocando la puerta de fierro de la casa de su amigo.

—¡Vámonos, Benito, apúrate que se nos hace tarde!

—¡Ahí voy, amigo Julián, espérate que me estoy peinando!

—¡Ándale, ni que estuvieras tan guapo! Si no vamos a una fiesta, vamos a chambear.

Después de las acostumbradas escaramuzas, salieron rumbo a los domicilios de las personas que generosamente ofrecieron su ayuda para apoyar las acciones de la cocina humanitaria. El trabajo era arduo pero muy gratificante. La cocina en la que prestaban su apoyo honorario y desinteresado, era una de las muchas reacciones sociales positivas que aparecieron en favor de cientos de personas que perdieron sus fuentes de trabajo, otros que no lo tenían antes de la contingencia y en general de varios grupos vulnerables.

Recorrieron muchas calles de la ciudad durante varias horas y por la tarde recalaron a la colonia donde se ubica la altruista cocina que genera alivio y esperanza. Fueron recibidos y ayudados por varias personas, hombres y mujeres, que compartían el buen propósito de dar sin interés, sin pedir nada a cambio, con el único objetivo de mitigar, en la medida de lo posible, el hambre, la carencia y la necesidad que sufren muchos conciudadanos.

Órale, les fue muy bien —dijo Selene entusiasmada— mientras ayudaba a bajar unas cosas. El día había sido muy productivo. Lo generoso de los donativos recogidos, el aporte recibido en especie en el domicilio y algunas ayudas económicas, además de garantizar la alimentación del día siguiente para muchos beneficiarios, permitirían dar el tiempo necesario para seguir realizando la colecta permanente sin dejar  de atender la demanda de ayuda alimentaria.

Son pocos los que dan la cara recogiendo los donativos y estando al frente tanto de la cocina, como de la organización permanente y logística diaria. Pero, hay muchas personas más que, bajo el anonimato, sirven de igual manera, con esfuerzo y dedicación a tan noble causa. Algunas de ellas son las personas que clasifican, ordenan y limpian los víveres que se reciben y, sobre todo, las que se dedican a preparar los guisados que se entregan calientitos y apetitosos a los eventuales y necesitados comensales.

Es muy alentador ver de cerca esas imágenes de mujeres valientes y generosas que dedican parte de su tiempo a cocinar las viandas que satisfarán la anónima pero trágica necesidad de los infortunados. Ver que responden al agudo cansancio diario con sonrisas espontáneas, con la alegría del corazón, con esa dicha que solo se consigue con acciones que van más allá de lo común y lo cotidiano; con esa gratificante sensación que da el sentimiento de solidaridad y la comprensión del dolor ajeno. Ese es el verdadero milagro que ha surgido desde las entrañas de una situación emergente. Es la solidaridad humana, una de las muchas lecciones que trae a nuestras vidas esta pandemia.

Da mucho gusto ver la luz de esas personas que están por encima de la generalidad y la muchedumbre. En el combate contra la muerte, los médicos, enfermeras y todo del personal de salud, héroes de carne y hueso que trascenderán de muchas formas al final de esta epopeya. En el ámbito general hay muchas otras personas, algunos empresarios que han asumido un papel solidario con sus trabajadores, los policías honestos que cumplen su trabajo, y más, muchos más que creen en la generosidad de la humanidad.

En esta ocasión, consideré importante referirme a este grupo o grupos de personas, que tomaron la iniciativa de servir a los demás. Hacer mención, como una especie de modesto homenaje, a su loable intención, a su vocación humanitaria, sacrificando tiempo y familia y a veces más. Es un alivio, más allá de tantas calamidades: naturales como la pandemiapolíticas como las malas decisiones y falta de visión y sentido común de algunos gobernadores y presidentes municipales; y  las sociales, como la irresponsabilidad y la ignorancia de muchos habitantes; saber que existen muchas personas positivas, que apuestan por la grandeza del espíritu, la buena fe y la generosidad.

De pronto, se escucha una voz desde del interior de la cocina, que dice:

—¡Ya quedó esto listo! Todo en orden para preparar la comida mañana. Voy a guisar unas ricas albóndigas en chipotle, un caldo de res, frijoles y arroz rojo. ¿Qué te parece Julián?

—De lujo, mi estimada Magaly. Ya ni me digas, porque nomás antojas. Bueno, vámonos porque mañana tenemos mucho trabajo.  Espero que sea un día tan bueno como el de hoy. Dios nos bendiga.

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jueves, 21 de mayo de 2020

"No a la violencia intrafamiliar"



JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"No a la violencia intrafamiliar"



El sonido monótono de la pelota sobre la pared dominaba la escena ese día nublado. No se sabía que era más sombrío, si el oscuro nubarrón que acechaba a la tarde o la ominosa presencia de la pandemia. Lo que sí se sabía era que al interior de la modesta casa que habitaban los Robles Rodríguez, la paciencia no era la más asentada de sus inquilinos.

Don Regino, el patriarca del clan, volteaba con cierto disimulo hacia donde estaba Huguito el niño de ocho añitos que, de manera sistemática y alternada, pateaba el balón de futbol contra la colaborativa pared que infaliblemente lo regresaba a sus pies con la misma intensidad de su patada. Tal vez si el niño hubiese visto el furor de la mirada paterna hubiera pitado al menos el final del primer tiempo para irse a comerciales, era de esas bien llamadas miradas que matan

Doña Nachita, la señora de la casa, intentaba poner a tono el medio kilo de codillo de cerdo que, acompañado de frijoles refritos, significaba la primera y única comida del día. La familia era más o menos tranquila, generalmente no había grandes controversias entre sus miembros, al menos no terminaban en batalla campal. Las edades de los cuatro hijos, tenían un espacio entre ellos de dos años. Además de Huguito, estaba Chayito, de diez, María de doce y Julián de catorce.

Regino Robles se sentía muy angustiado, la situación de aislamiento por el coronavirus le había dejado sin trabajo. El restaurante en el que trabajaba de mesero tuvo que cerrar sus puertas y despedir, por lo menos de manera temporal, a todo el personal que atendía el lugar. La falta de su modesto sueldo y, sobre todo, de las propinas le había dejado en un completo estado de indefensión. Su esposa, hacendosa y solidaria, dedicaba todos sus esfuerzos a la atención de sus hijos y esposo, que no era poca cosa. El ajetreo del trabajo doméstico, la comida, lavar la ropa y cuidar todos los detalles escolares de sus hijos consumían hasta la última gota de su energía, terminando cada día agotada. Sus mejores momentos eran cuando los hijos estaban en clases, no porque no los quisiera, pues los adoraba a todos, desde el más grande hasta el más chico que, por supuesto, era su adoración; sino porque estando sola era capaz de pensar, organizar e idear alguna cosa que ayudara a mejorar las cosas en la familia. Pero, las últimas dos semanas había sentido un gran desasosiego, la escasez material en casa empezaba a cobrar facturas emocionales. La preocupación por el contagio de sus hijos o de otros familiares, la prolongación del confinamiento y consecuentemente la falta de ingresos, cada día le pesaban más.

Se habían agotado las reservas económicas, los ahorros eran ya un dato histórico, concluido. El padre de familia se esforzaba por pensar en soluciones, la esposa se afanaba por hacer rendir el escaso potaje del día. Mientras eso sucedía en la angustiosa y cruda realidad de los mayores, el escenario infantil y juvenil en casa era muy distinto. Tal vez su natural inconciencia producía aquellas burbujas mágicas en las que podían aislarse fácilmente de un mundo acechante y agresivo. El más pequeño seguía pateando ininterrumpidamente la pelota contra la pared, Chayito daba de batacazos a una vieja tina de acero galvanizado, siempre le gustó el rock pesado; del otro lado del cuarto, María y Julián disputaban la posesión de una chamarra de mezclilla propiedad de su papá. Tiraban con tal enjundia de la prenda de vestir que en un momento, inesperado por ellos, se escuchó un seco y prolongado crujir al rasgarse por la mitad.

—¡Carajos, pónganse en paz! Ya rompieron mi chamarra preferida, canijos —dijo el padre enojado— mientras la mamá les conminó a la calma, muy ecuánime, de acuerdo a su estilo.

Los cónyuges se miraron como buscando respuestas mutuamente, la impaciencia se podía notar a leguas de distancia. Sus ojos, generalmente de borrego a medio morir, esta vez enrojecidos, saltones y ojerosos parecían cantar una triste canción. Ellos sabían que tenían que esforzarse en mantener la calma. La mejor manera de soportar una crisis tan aguda como esa, debía fincarse en el amor y en la paciencia. Sabían que no era tarea fácil, pero estaban seguros que tampoco imposible. Ella era mucho más aguantadora, equilibrada y paciente; él —en contraparte— era un hombre más impulsivo, visceral.

Tomó su chamarra rota entre sus manos y le dio mucha tristeza verla destruida, tirada en el piso. Sus hijos mayores seguían discutiendo por cualquier cosa sin importancia, Nachita salió a recoger la servilleta de tela, la cazuela dejaba escapar un rico aroma, la pequeña rockera tundía con renovado entusiasmo su improvisado bombo cuyo diabólico tronido rebotaba en los tímpanos del papá, que apretaba sus ojos con fuerza como intentando liberarse de algún tormento chino o apache. Dio unos pasos para ir a arrebatar las dos cucharas grandes que servían de baquetas a la peque musical, cuando de pronto sucedió la peor tragedia que se hubieran imaginado en la familia.

La cazuela del guisado voló por los aires dando más vueltas que los voladores de Papantla, mientras en sus varios giros arrojaba comida caliente por todos lados, terminando su viaje hasta caer embrocada en el frío piso de la casa. Su cara compungida delataba al pequeño futbolista émulo de Cristiano Ronaldo, ni siquiera tuvo que decirle a su padre que, en el intento de una nueva y magistral pirueta futbolera, acabó tumbando con la pelota lo que iba a ser la comida del día. El papá no dijo nada al cándido goleador. Su cara inició una transformación del tipo de Hulk, el hombre verde, aunque el buen Regino se pasó de tueste y de verde tornó a morado. El saber que todos en casa se quedarían sin comer ese día lo trastornó al grado de ponerse fúrico. Sacó de un tirón su cinturón piteado y, blandiéndolo amenazadoramente, se abalanzó sobre el niño futbolero que resignadamente esperaba el golpe. Cuando el cinturón vengador hacía el recorrido hacia atrás de la cabeza del hombre verdugo para tomar vuelo, se escuchó una potente voz, que dijo: «¡No lo hagas, por favor, amor!» Era la hermosa voz de su mujer que, de manera convincente pronunció la palabra mágica, la que mueve los hilos de la vida, la que calma tempestades, la que frena la violencia, la que une a las personas y salva a las familias. Amor, la palabra clave para sortear todas las adversidades, incluso el aislamiento a que nos condenó esta pandemia. ¡No más violencia intrafamiliar!

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Dicen las Integrantes de Banda Femenil Las Primeras… “Salud Por Él”


ENRIQUE GONZÁLEZ RODRÍGUEZ / Periodismo Nayarita

Tepic, Nay.-  Canción escrita por el reconocido cantautor sinaloense Espinoza Paz, “Salud Por Él” es el nuevo sencillo promocional de Banda Femenil Las Primeras, el cual ya se encuentra disponible en todas las plataformas digitales y al cual la banda le realiza en éstos difíciles días su respectiva promoción.
     
Con ésta sentimental canción que habla de despecho, amor y desamor, las integrantes de ésta femenil agrupación con sede en la ciudad de Guadalajara, jalisco, le apuestan a una línea musical que ha logrado buen impacto y una gran aceptación entre sus seguidores, buscando así la continuidad y el mantenerse vigentes en el gusto de la gente, a la vez que adaptándose a los cambios que empieza a demandar el actual mercado de la música.

“Salud Por Él”, viene incluida en un ep de versión física y digital en donde también se incluyen las canciones “Me Amarré El Corazón”, la cual fuera hace algunos años un gran éxito en la voz de Alicia Villareal, y “El Primer Adiós”. la cual es inédita, presentándole así al público un trabajo musical en el que queda de manifiesto la versatilidad de esta pionera agrupación femenil tapatía.

Aún cuando la industria musical y del entretenimiento está paralizada en lo que a conciertos y actividades presenciales se
refiere, es vital para los artistas el mantener la vigencia mediante el contacto alterno con su público, algo que las integrantes de Banda Femenil Las Primeras entienden y tienen muy presente por lo que a la par de la puesta en circulación de la canción “Salud Por Él”, estarán realizando labor promocional del mismo por los más variados canales de comunicación digitales y tradicionales de diferentes regiones de la república mexicana.

miércoles, 13 de mayo de 2020

"Buscar al asesino"



JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"Buscar al asesino"



Historias van, historias vienen y la pandemia sigue dando de qué hablar. En las redes sociales circulan noticias, memes, estadísticas y muchas cosas más. Mensajes llenos de optimismo, críticas al sistema de salud y al gobierno, comentarios negativos, muestras de la desesperación por el aislamiento, necedades, felicitaciones a los médicos y enfermeras, estadísticas y una serie de videos de científicos conocidos y desconocidos. En fin, el escenario social y virtual está lleno de información, buena y mala, útil y dañina.

Soy un concienzudo revisor de las publicaciones interesantes, aunque no muy dado a comentar en cualquier lado, mucho menos cuando se trata de auténticos galimatías verbales en los que se ofenden y se dicen de todo. Algunas personas dejan ver su buena documentación, otros de plano se mecen en órbitas ininteligibles, pero son abrumadoras en cuanto a la pasión con que defienden sus disparatados puntos de vista. Creo que en eso radica esencialmente la libertad de expresión y es importante defenderla, aunque no estés de acuerdo con la versión de tu interlocutor. Pero, a veces tienes que hacer un buen esfuerzo para reprimir las ganas de contestar algunos comentarios que de plano dan pena o tristeza. Aspiro profundamente y abandono el sitio sin dar la batalla. No tiene ningún caso hacerlo.

Me refiero en particular a los comentarios que tienen un parentesco directo con la ignorancia, condición que merece todo mi respeto puesto que muchas personas padecen ese flagelo sin tener la menor culpa de ello, a diferencia de la ignorancia supina en la que el saber algo tan importante como conservar la vida es una obligación. Es muy respetable cualquier opinión, más si están en el muro propio, dejando de lado la intromisión en otros espacios donde se nos puede objetar al menos eso. Así había visto la situación de la pandemia en redes sociales, participando en la mitigación del estrés por aislamiento con algunos temas para la reflexión y el entretenimiento. Leí recientemente, por mera casualidad, opiniones crasas que lo único que pudiera disculparlas o al menos justificarlas, sería que esas personas estuvieran ubicadas en la primera de las hipótesis, condiciones o términos que acabo de mencionar.

Estando ya en los días próximos al pico de la pandemia, con más de tres mil trescientos fallecidos en el país y veintidós en nuestro estado de Nayarit a causa del coronavirus, ver comentarios con un nivel de expresión científica: «El virus no es cierto, no existe» y, siguiendo su magistral conferencia dice: «sólo es para que el gobierno, nos saque dinero», a este inobjetable postulado, le siguieron una buena cantidad de publicaciones coadyuvantes que arroparon la axiomática aseveración.

Me retiré casi de manera instantánea del sitio digital llevándome un mal sabor de boca, no quise saber más del tema, aunque me sigue preocupando en demasía la falta de responsabilidad de un buen sector de la sociedad que, por su escepticismo, sigue poniendo en riesgo la estrategia para la mitigación de contagios y, por ende, la salud de la sociedad.

Había decidido escribir, mientras dura el confinamiento social, historias que impulsaran la reflexión acerca de la responsabilidad y el compromiso de acatar las indicaciones o reglas del juego. Así fue, con los relatos de las dos semanas anteriores: “Dos problemas, un camino” e “Historias del Coronavirus”, pero el día de ayer, ocho de mayo, en la familia nos despertamos con la noticia que un pariente cercano, esposo de mi cuñada, murió a causa del Covid-19 en la ciudad de México. No intento traer acá un asunto familiar tan doloroso. Basta y sobra el sentimiento de pérdida, tan fatídico e inesperado. Esto último hace única la sensación indescriptible de ella, mi cuñada; de estar con tu ser más cercano, tu pareja y compañero de vida por más de cuatro décadas, de pronto sentirse mal, llevarlo al hospital por la noche, internarlo, no saber de él hasta el otro día, diagnóstico positivo del maldito coronavirus, que transcurra un día más sin tener nuevas acerca del paciente y a la mañana siguiente, recibir la noticia de su defunción. Alguien puede imaginar el dolor lacerante ocasionado por la letal noticia. Su pareja se ha ido, ha partido a la eternidad sin siquiera despedirse de ella, de sus hijos, hermanos y demás familia. Aquel hombre fuerte, alegre, activo y amoroso regresará a sus manos en una vasija metálica, convertido en cenizas. Sin servicios funerarios, sin abrazos solidarios y compasivos, sin ninguna otra muestra de amor, amistad o gratitud.

No escribí la historia que tenía en mente. Para qué, si este suceso, trágico e imprevisto, ilustra de la mejor manera, lo que puede ocurrirnos, aun cuando se cuidan las personas, ¿Qué no podrá pasar cuando se distienden las medidas precautorias por irresponsabilidad o por ignorancia?

Ninguna estadística tiene vida propia, ningún número significa nada sin nombre y apellido. La numeralia oficial no deja de ser un frío algoritmo que pasa por la mente pero no por el corazón. La verdadera sensibilidad, la apertura comprensiva del indicador oculto es la proximidad. Es cuando las cifras impactan tu cercanía y hacen añicos la fortaleza de tu anonimato. Cuando las noticias son para ti y no para ningún otro, entonces se vuelven realidad y tocan a tu puerta con un mensaje de muerte y desolación. Discutir que el virus existe o no existe en este momento sería una necedad imperdonable. Para quien sufre una pérdida así no existe consuelo en la generalidad, en la muerte multitudinaria, en el no ser sólo uno el que muere sino muchos. Cuando se padece una pérdida de esa naturaleza no hay otra opción que la tristeza del que sufre y la comprensión y la empatía de  la familia y los amigos. Es esta la historia verídica de una tragedia familiar que rompe todas las expectativas y resquebraja los sueños, poniendo de manifiesto que la muerte acecha en cada esquina. ¿Existe o no existe el virus? Si la respuesta es no. Entonces, pedirles a esos incrédulos que me ayuden a buscar al asesino de mi familiar.

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• “No bajaremos la guardia ante los temas de salud pública”: Nadia Ramírez INICIA NADIA RAMIREZ CAMPAÑA DE DESCACHARRIZACION 2020 EN XALISCO


Xalisco, Nayarit. 11 de mayo del 2020. -(Por Octavio Salas).- Como medida de reducción de riesgos en la transmisión del dengue, zika y chikungunya, por indicaciones de la Presidente Municipal de Xalisco, Nadia Ramírez, este lunes arrancó la campaña de descacharrización 2020 en Xalisco.
 Dicha campaña se desprende de la jornada estatal de Lucha contra la Arbovirosis, y en Xalisco contará de 5 rutas cubriendo en su totalidad las colonias de la cabecera municipal, así como los ejidos de Pantanal, Testerazo, Aquiles Serdán, Emiliano Zapata “Las Majadas” y la Curva.
“Durante estas fechas de contingencia por el coronavirus, en Xalisco no bajaremos la guardia con las acciones de salud pública, tal como la prevención de dengue”, así lo dio a conocer Nadia Ramírez.
En una primera etapa de la jornada, se invitó a la ciudadanía a comenzar con las acciones de prevención desde sus hogares: manteniendo limpios patios y azoteas bajo la recomendación de: lava, tapa, voltea y limpia.
Para la etapa de la descacharrización la convocatoria consiste en sacar de los hogares llantas, cubetas y botellas viejas entre otros recipientes que puedan acumular agua; las brigadas municipales pasaran por todas las colonias a recogerlos. La programación de rutas ya se encuentra publicada en las redes sociales oficiales del Ayuntamiento de Xalisco.

-El recurso fue destinado para apoyar a la ciudadanía con vales de despensa. ANTE COVID-19 DONAN SU SUELDO FUNCIONARIOS DE XALISCO


Xalisco Nayarit, mayo de 2020. -(Por Octavio Salas).-En un gesto de solidaridad con la población más vulnerable ante la contingencia del COVID-19 del municipio de Xalisco, la presidente municipal, Nadia Ramírez, integrantes del H. Cabildo y el personal de confianza y de sindicato de la Administración Municipal, donaron de manera voluntaria una quincena de sueldo.

Este recurso, fue destinado para desarrollar el programa de apoyo social a personas en situación vulnerable de Xalisco, incluidos quienes han sido afectados en sus ingresos debido a la contingencia sanitaria por la presencia del COVID-19, y consiste en otorgar vales de despensa a domicilio para ser canjeados en tiendas de abarrotes participantes.

Atendiendo las indicaciones de seguridad que han emitido las autoridades, será el personal del DIF Xalisco quien estará visitando hogares en ésta situación, evitando así que las personas salgan de su casa. Quienes tengan dudas respecto de este apoyo, pueden comunicarse a las líneas 211 20 20 y 2 11 01 21 de la presidencia municipal o a través de las redes sociales oficiales.

viernes, 8 de mayo de 2020

MULTAS MAYORES A LAS ACTUALES A QUIEN MALTRATE AL PERSONAL DE SALUD: POLO DOMINGUEZ


Tepic Nayarit mayo de 2020.-(Por Octavio Salas).- Ante esta contingencia sanitaria por el COVID-19- conocido como Coronavirus, no se puede permitir que se agredan física o verbalmente a personal médico y de enfermería que labore en cualquier institución de salud, por lo que los diputados estarán aprobando en esta semana, una iniciativa de reforma al Código Penal de nuestro estado, para que las penalidades se incrementen en una mitad más de lo ya estipulado por cometer este tipo de delitos aseveró el líder del congreso Leopoldo Domínguez.
No se puede permitir, dijo el presidente de la Comisión de Gobierno Legislativo, Leopoldo Domínguez González, que aun cuando este personal médico y de enfermería expone su vida por atender y salvar vidas de las personas con contagio del coronavirus, todavía haya gente que los agreda, eso no se puede permitir dijo el legislador.
Es por ello que en esta XXXII legislatura se reconocer el trabajo de todos los trabajadores de salud, que dan y siguen dando muestras de valor, coraje, entrega, pasión, pero sobre todo de responsabilidad, dijo el líder de esta legislatura en el estado.
Reconoció que desgraciadamente las agresiones al personal médico van en aumento en todo el país y Nayarit, no ha sido la excepción, ya que hasta este momento se tienen registradas 7 denuncias ante las instancias correspondientes de agresiones contra el personal de la bata blanca, de ahí que preocupados y ocupados en desterrar de manera tajante estas prácticas violentas contra este sector médico, los diputados de las diferentes fracciones parlamentarias indudablemente que estarán votando a favor esta iniciativa de reforma penal y de esta manera elevar las sanciones penales a los agresores contra el personal médico en esta contingencia.
Dicha reforma presentada, en sesión ordinaria realizada de manera virtual, por el diputado Leopoldo Domínguez González y de la diputada Rosa Mirna Mora Romano, quienes buscan incluir dos párrafos en el artículo 215 del Código Penal para que se castigue penalmente a quienes atenten contra la seguridad e integridad de los profesionales de la salud.
Actualmente dicho artículo del Código Penal para el Estado de Nayarit, señala que al que cometa un delito en contra de un servidor público en el acto de ejercer sus funciones o con motivo de ellas, se le aplicará de tres a siete años de prisión, además de las sanciones que le corresponda por el delito o los delitos cometidos.
Por lo que se propone que en una declaración de emergencia o contingencia sanitaria se aumente hasta en una mitad la pena de prisión a quien agreda a cualquier médico, cirujano, personal de enfermería y similares y auxiliares o personal de salud del sector privado o público que presten sus servicios en el estado y que, si las agresiones se cometieran en contra de una mujer, la pena se incrementará hasta en una mitad adicional.
Polo Domínguez, subrayó que de acuerdo a las estadísticas se tienen que hay poco más de los 2 mil enfermos por coronavirus que laboran en alguna institución de salud y que lamentablemente más de 80 de estos trabajadores han fallecido, por lo que de manera responsable los diputados de esta legislatura actuamos con responsabilidad para garantizar su protección en este momento justo.

miércoles, 6 de mayo de 2020

"Historias del Coronavirus"



JOSÉ MANUEL ELIZONDO CUEVAS / 


Periodismo Nayarita



"Historias del Coronavirus"



Desde muy temprano se veía la movilización en la calle Violeta de la populosa colonia "3 de julio". Era notorio que se preparaba algo importante pues toda la familia estaba de pie y en acción, cosa que no era propiamente la costumbre de ellos. La camioneta pick up de color azul y de modelo no muy reciente había echado varios viajes a esa hora de la mañana. Su propietario, don Rufino Pedroza, acusaba el cansancio de su tempranero ajetreo.

Mesas, sillas, manteles, servilletas desechables, botanas y dos hieleras grandes con anuncio  de una marca de cerveza que tiene nombre de océano, unas tinas de fierro de las que se usan para la birria en los ranchos y unas misteriosas cajas de cartón que abrazaba con mucho cuidado, con una ternura comparable a la que sentía por sus nietos. Parecía que algo frágil y muy valioso se encontraba al interior de las mencionadas cajas. ¿Qué podría ser el contenido misterioso en estos tiempos de pandemia y ley seca?

Dejemos esas dudas para más adelante. Mejor vamos a seguir los pasos a la familia Pedroza, conocida por la raza como los gordos. Ahí está Chemo, uno de los hijos menores de don Rufino, echando agua con la manguera para lavar el patio. Forentina, la hija de en medio, ayudando a doña Gertrudis, su laboriosa madre. En fin, casi todos los distinguidos miembros de la estimada familia en plena faena, excepto Juanito, el menor de todos, que incrédulo observa el extenuante vaivén de sus parientes.

—¿Estás seguro que quieres hacer hoy la fiesta de Melissa? ¿Sí sabes que está prohibido hacer eso por la pandemia, verdad? Para qué te metes y nos metes a todos en problemas si podemos hacerla en un par de meses que pase todo esto. Sirve que pueden venir los primos de Tijuana.

—¿Queeé, estás loco acaso Juanito? Ya tenemos todo listo y aunque no vengan los primos, vendrá toda la familia de aquí y de los pueblos cercanos. ¡Se va a poner chévere!

Dicho lo anterior, se alejó de él para seguir haciendo los preparativos. El jovencito —que era el único que se oponía a la fiesta—, se quedó con ojos de furia viendo a su padre que se alejaba canturreando una rola de los Ángeles Azules, muy entusiasmado con el pachangón en proceso.

Nada podía faltar, todos había cumplido al dedillo sus comisiones. La cita para los invitados era a las tres de la tarde, apenas eran las doce y solo faltaba que llegara el norteño-banda. Dejando el festivo escenario a punto de turrón, todos fueron a acicalarse, excepto el chico opositor, que prefirió encerrarse en su cuarto. Desde ahí, un poco más tarde, se puso a ver cómo empezó a llegar la raza. Los Pérez Arce, López Bonilla, Arias Pedroza y muchas familias más. Muchos morros, amigos de Chemo y de Melissa, los invitados de los invitados, sin contar los típicos colados.

En un par de horas aquello era un pandemonio. La estridente música, los gritos, las porras y uno que otro cuete (de los dos tipos, de los que truenan y de los que al otro día tienen resaca) hacían del lugar una sucursal del mismísimo infierno. Esas circunstancias calificaban al sacrosanto hogar de los Pedroza para una denuncia por escándalo o vecinos ruidosos, pero si a ello le sumaban la agravante de estar escenificándolo en plena contingencia sanitaria, pues entonces ya eso lo pintaba como algo que se pasaba de la raya. Sucedió lo que tenía que pasar. Los vecinos de los Pedroza, muchas familias que se habían ajustado a las indicaciones de las autoridades de salud, se sintieron ofendidas por el desacato y valemadismo de los vecinos incómodos y, cual debe de ser, denunciaron el hecho a las autoridades competentes.

Momentos más tarde, cuando la fiesta estaba en su apogeo, en el clímax del jolgorio, cuando ya estaban unos “persas” y otros “hebreos”, excepto el buen Juanito refugiado en su búnker, se apareció la policía municipal en el portón del guateque. Después de los protocolos de rigor, exigieron la suspensión inmediata de la celebración tumultuosa. Primero, fueron los silbidos de desaprobación de los juerguistas, que lo hacían con tanta exaltación que parecían jilgueros en primavera. Luego, se asomó Nato el Popochas, beodo y pendenciero amigo del Chemo, que era de los de mecha corta, de los que siempre empezaban los pleitos. Todo estaba bien y más o menos controlado hasta que salió don Rufino (tal vez le pusieron el nombre por rufián) con tamaña piedra en la mano, aventando a los policías y diciendo que él estaba en su casa y podía hacer lo que quisiera. Se sintió el líder de las pandillas de Nueva York (quien vio la película entenderá) y arengó a toda la chusma en contra de los oficiales que sorprendidos no supieron cómo responder.

La horda (vulgo bola de pedernales) se abalanzó sobre los atónitos guardianes del orden que tuvieron que defenderse. Aquello se convirtió en casi una batalla campal en la que se imponía la superioridad numérica de los hunos (los de Atila) hasta que la llegada de refuerzos sometió a los rijosos, encabezados por el jefe del clan Pedroza, que de sentirse Atila, terminó convertido en Atole. Muchos heridos, destrozos en la casa pachanguera y otras aledañas, cantidad de detenidos, desorden, inquietud, golpes, disparos. Todo ello por la irresponsabilidad y el menosprecio de la vida humana por parte de algunas personas que no tienen sensibilidad ni empatía por las causas sociales prioritarias. En resumen, la fiesta terminó antes de tiempo y pudo ser más trágico el desenlace. Todo por no respetar las reglas del juego. - HAGAMOS NUESTRA PARTE, EN LA MEDIDA DE LO POSIBLE.

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sábado, 2 de mayo de 2020

“Los Jalacables Jalisco” Iluminarán hoy la Metrópoli Jalisciense


*A LAS 21:00 HORAS CREARÁN UN ESPECTÁCULO LUMÍNICO QUE SE VERÁ EN TODA LA ZONA METROPOLITANA DE GUADALAJARA


A quien corresponda:

Ante los estragos generados por el COVID-19, pandemia que ha golpeado la salud de muchos seres humanos alrededor del mundo y motivo por el cual lamentablemente, se han sufrido diversas pérdidas, tanto de vidas, como económicas en nuestro país.

Dentro de este cúmulo de pérdidas, se encuentra el encarar un menoscabo laboral, dentro del cual, una de las industrias más afectadas es la de proveedores de equipo técnico, casas productoras y trabajadores en general.

Nosotros “Los Jalacables Jalisco”, somos un grupo que pertenecemos a un conglomerado nacional (“Los Jalacables”), sin fines políticos, ni partidistas, compuesto por stage hands, técnicos de audio, video e iluminación, operadores, riggers, equipos de producción, ventas, logística, etc., que integramos la industria de la cultura, el espectáculo y entretenimiento y nuestra fuente de trabajo, ha sido una de las primeras en detenerse y de las últimas en reanudarse.

Es por tal que artistas, bailarines, coreógrafos, músicos, actores, agencias de publicidad, centros de espectáculos entre otros, enfrentan esta complicada crisis junto a nosotros y nuestras familias.

Los empresarios e inversionistas nacionales y extranjeros que vienen a nuestro estado a realizar shows de grandes marcas, también reciente la crisis, sin embargo, cabe mencionar que muchos de nuestros compañeros se desempeñan como trabajadores independientes (freelance) o eventuales y no cuentan con ningún tipo de apoyo hasta el momento. Del mismo modo nuestros compañeros cargadores, choferes, vendedores, personal de seguridad, etc.

El público es a quién nos debemos y sin los espectadores, sin eventos, no podemos recibir ningún ingreso, pues ellos hacen posible nuestro arte. Es tiempos cotidianos nuestro trabajo no siempre es pagado de manera oportuna y nuestras labores son muchas. Son pocos los que cuentan con seguridad social y el riesgo de trabajo es de proporciones considerables.

Por todo lo anterior, mucho se agradecerá al Gobierno Estatal y Municipal del Estado de Jalisco, tener a bien, considerar algún tipo de apoyo o estímulo para el gremio, sabemos que son tiempos difíciles, pero al ver a nuestras familias, solicitamos amablemente de su colaboración y apoyo.

A nuestros compañeros y amigos de los medios de comunicación, les informamos que el próximo 2 de mayo del presente a las 21:00 horas, nos manifestaremos de manera pacífica, como lo sabemos hacer: creando un espectáculo lumínico que se verá en toda la zona metropolitana de Guadalajara, iluminando con nuestros equipos la ciudad y municipios aledaños, como una expresión artística, pero también, un grito silencioso de apoyo para nuestro gremio y nuestros compañeros en situaciones más críticas.

La dirección donde nuestros representantes estatales estarán recibiéndolos a todos los medios de comunicación a partir de las 20:00 horas del dia 2 de mayo del presente, es:

Santo Tomás 2875 Interior 2
Col San Isidro
(cerca de Terraza Oblatos)

Alejandro Dueñas Valadez
Miguel Ángel Valeriano Pérez
Marco Antonio Ruiz
Diego León

Agradeceríamos profundamente nos apoyen en difundir esta información y que todo el público de Guadalajara pueda disfrutar de este gran show, así como ayudar a darnos voz a los que estamos detrás, a salir de la obscuridad, del anonimato y que nuestras autoridades puedan voltear sus ojos y destinar recursos a una industria que tiene una derrama económica muy importante.

Posteriormente se convocará a una marcha de manera pacífica y respetando las medidas sanitarias a Palacio de Gobierno para dejar un pliego petitorio al Señor Gobernador Enrique Alfaro Ramírez y pediremos su anuencia de manera pronta y expedita.

Agradecemos de antemano su apoyo de manera infinita.

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104 Aniversario del Sindicalismo en Territorio Nacional


*SE ORIGINÓ EN BELLAVISTA,  NAYARIT EL 7 DE MAYO DE 1916


SAÚL LLAMAS LÓPEZ / Periodismo Nayarita

Bellavista, Nay.-  La Casa  Aguirre (El segundo dueño de la fábrica desde 1857) a la muerte de don Santiago Stephens quien fuera un Ingeniero Mecánico inglés con ideas liberales, aconsejaba a los obreros y los informaba de acontecimientos mundiales, hasta los llegó a defender del señor Faustino Somellera que era el administrador de la Casa Aguirre, contrataba a Arturo Acroyd, un inglés que había estado muchos años en Brasil mandando esclavos; este hombre apoyado por Faustino Somellera, jefe supremo de la poderosa Casa Aguirre y además el mayor verdugo de su tiempo, quien frecuentemente se teñía las manos con sangre de los trabajadores, implantaron un régimen de terror y esclavitud, imponiendo la jornada de 14 a 16 horas de trabajo diarias. Se entraba al trabajo a las cinco de la mañana y se tenía que abandonarlo a las 12 de la noche, dándole a los trabajadores  únicamente 5 minutos para tomar sus alimentos dentro de la fábrica, pues al Trabajador que se pasara de ese pequeño tiempo lo paraban a patadas y a bofetadas y si se enfurecía el amo lo mandaba a la cárcel. 
Don Arturo, (trataba a los trabajadores de aquí como a los esclavos de Brasil) se daba el lujo de azotar a los infelices trabajadores; y naturalmente ese trato fue generando el espíritu de rebeldía. En 1894, los obreros de la preparación encabezados por Francisca y Maclovia Quintero, Victoriana Arroyo y Adelaida y Mariana Castañeda, hicieron un paro que no dio los resultados que se querían. En 1896 hubo otro movimiento con resultados poco ventajosos. Los años siguieron pasando y los tratos a los obreros no cedían, sin embargo ya a inicios del año 1900 los hermanos Flores Magón, especialmente en Ricardo, (pionero de la Revolución Mexicana) influyó determinadamente en los obreros de México con sus discursos políticos así como con sus artículos periodísticos que aparecían en periódicos independientes como, “Regeneración”.

Estas ideas, junto con la acumulación de año de injusticias y maltrato a los obreros impulsaron  a los hermanos Elías (Enrique y Pedro) a realizar la histórica huelga.

La movilización obrera en Bellavista fue antes que Cananea, Sonora en 1906 y Río Blanco, Veracruz en 1907, siendo la Primera en el país.

Enrique y Pedro Elías Salazar, convertidos en líderes naturales de los obreros textiles, con las experiencias de 1894 (con las hermanas Quintero) y en 1896 que vivieron siendo muy jóvenes y animados por los ideales liberales sociales de los Flores Magón, preparaban muy cuidadosamente todos los detalles de la protesta pública ante el gobierno establecido en el territorio.

Al amanecer de un día “normal” de trabajo, 4:30 de la mañana del día Lunes 20 de Marzo de 1905, el viejo silbato de la factoría estaría convocando al trabajo como habitualmente lo venía haciendo desde hace más de sesenta y cuatro años (desde 1841) sin interrupción; pero esta vez los obreros respondían al llamado solo para organizarse frente a la fábrica antes de llegar al viejo portón, para momentos después emprender la marcha hacia la capital, Tepic.

Hombres y mujeres iban pasando lista de presentes, optimistamente con la estimulante frescura de a esas horas de la mañana proporcionaban los frondosos fresnos. Nadie, ni uno solo hombre dio un paso más allá de la puerta de entrada de la fábrica. Directores y mayordomos iban y venían desesperados rumiando su coraje y desesperación ante la actitud de los obreros, iban y venían con las manos echadas hacia atrás, tramando quizá la dulce venganza, los obreros entre tanto, todos junto con familiares y correligionarios de otros centros de trabajo cercanos, sumando más de quinientas personas en total inician la caminata a pie por el viejo camino de terracería.

Cerca de las 9 de la mañana llegaban a Tepic en el mayor orden que nos podemos imaginar. Estaban en las goteras de la población con algunas leyendas desafiantes contra el poder constituido.

En las primeras calles los encontró el ejercito que listo estaba a apretar el gatillo de sus empolvadas armas para disolver cuanto antes la manifestación, caso que los trabajadores se negara a hacerlo voluntariamente, según lo advirtieron los oficiales a los líderes que encabezaban la muchedumbre. Y por más que Enrique y Pedro Elías trataron de explicar el objeto pacífico de la protesta, solicitando de ella permiso para continuar hasta la casa de gobierno para poder presentar su queja y pliego petitorio, el pretoriano que comandaba el cuerpo de militares una y otra vez con voz enérgica, casi gritando les exige, les ordena que se retiren o se verá en la necesidad de abrir fuego.

— ¡Retírense, es preferible! ¡Tenemos órdenes de disparar a la primera manifestación de violencia o de que se nieguen a retirarse!
— Pero Señor Oficial, permítanos. Aseguramos a usted orden y disciplina en nuestros movimientos hasta la casa de gobierno, decía Enrique G. Elías.
— ¡Ni un paso más, he dicho! ¡Preparen! ¡Apunten!... Se escuchó la ronca voz del oficial.

A lo que los líderes para evitar que la sangre corriera, tanto la suya como la de sus hermanos, prefirieron regresar en la misma forma que llegaron. Solo que no pudieron impedir que muchos de los trabajadores se dispersaran perdiéndose en  los montes cercanos por temor a que el ejército les diera alcance y pudiera masacrarlos.

Inútilmente esperaron un día después la respuesta del jefe político General Mariano Ruiz, razón por la que se vieron obligados a reanudar labores en el centro de trabajo.

“En 1905, ya se verificó una huelga en toda forma, en donde los obreros ni hicieron caso de las amenazas de don Faustino Somellera, que pretendía impedir el movimiento; desgraciadamente nuestra huelga fracasó, por falta de apoyo a las autoridades; indiferencia del comercio y cobardía de la prensa local; todas las clases sociales tuvieron miedo, negándose a impartirnos la más insignificantes ayuda moral; para amedrentarnos, el gobierno desplegó gran aparato de fuerzas el jefe de esas gentes nos manifestó que tenía órdenes terminantemente de la Superioridad, para disolver a balazos grupos de dos personas”… Menciona Enrique G. Elías Salazar.
El comité directivo del primer sindicato (fundado un 7 de mayo de 1916) quedó como sigue:

 
Secretario General: Enrique G. Elías Salazar.
Secretario del Exterior: Pedro E. Elías Salazar.
Secretario del Interior: Ireneo Fuentes.
Tesorero: Silverio Cárdenas.
Subtesorero: Ramón Llamas.

Siguieron este movimiento: Micaela Ríos, Victoriana y Daniel Arroyo, Adelaida y Mariana Castañeda, Maclovía, Trinidad y Francisca Quintero, Julián Lara, Eusebio Torres Huerta, Ricardo Sandoval Vera, Posteriormente: Alberto Arroyo, José Stéphens, José Luis Vallejo, Everardo Cruz García, Clemente Soria; Juan Arana, Modesto Meza, Manuela Galicia, Ezequiel Padilla, Doña Sebastiana,  etc.
  
No cabe duda que la Huelga de Bellavista del 20 de Marzo de 1905, tuvo una gran influencia, directa o indirectamente en la sociedad obrera y política del México de principios de siglo XX.

Se les invita  conocer la Fábrica Textil de Bellavista Nayarit, está a ocho kilómetros en distancia de Tepic su capital, esta rumbo a la presa hidroeléctrica de Aguamilpa, hoy está en proceso la Escuela de Artes Escénicas.

Se hace la petición a la  SEP, otorgue este reconocimiento imprimiendo estos hechos verídicos en libros de texto gratuito a nivel primaria y secundaria, para el enriquecimiento cultural de nuestras nuevas generaciones, de lo que fue la primera

Huelga pacífica obrera textil en México, un  20 de Marzo de 1905, en la EX FACTORIA DE HILADOS Y TEJIDOS EN BELLAVISTA, NAYARIT., a la vez se realice Una película por parte de la SECRETARIA DE CULTURA (FONCA), para su difusión, en el país.