*POR
CULPA DE DIRECTORA DE DIF ESTATAL
*LA
MADRE LOS LLEVA A GUARIDA DE MARIGUANOS
Por
Gilberto Cervantes Rivera, poeta de Cucharas
Sin
realizar una investigación responsable, la directora del DIF Estatal, Liliana
Gómez, permitió que mi mujer María de Lourdes Hernández Hernández, llevara a
mis dos pequeñitos Gilberto INRI Ajaibán e Igor Juan Diego, a una casa donde
Juan Manuel Partida Montañez, marido de María de Jesús Hernández
Hernández, le atiza macizo a la
mariguana; yo personalmente lo he visto drogarse y mis niños; y también los
menores hijos de María de Jesús, Alejandro El Bolita, Cristian y Lupita,
observan como este muchacho le quema las patas a Judas: que buen ejemplo les
estamos dando a nuestros hijos, con la complicidad de DIF Estatal.
María
de Lourdes mi mujer, apoyada por DIF Estatal, decidió abandonar su hogar desde
junio 17, argumentando que ya no quería vivir conmigo; y pregunto, ¿no hubiera
sido mejor que se quedara en su casa y mientras se arreglaba el problema de
pareja, ella se quedara ahí donde por espacio de casi siete años convivimos?. La directora del DIF Estatal enredó las cosas,
permitiendo que mis pequeñitos vivan el infierno al cual los ha condenado su
madre María de Lourdes, misma que resultado de las evaluaciones que le
hicieron, resultó con ciertos problemas de tipo mental, que según los
psicólogos, se podían corregir con un tratamiento. Lo ordenaron, pero su
hermana María de Jesús ha estado impidiendo que mi mujer, vaya a las terapias;
me atrevo a decir que la está manipulando, que se está aprovechando que ella es
inmadura, para impedir que regrese a su hogar, como Lourdes misma me lo
confesó, cuando mi mujer le reclamó por estarle exigiendo dinero; Lourdes le
dijo que todo querían sacarlo de ella, porque el dinero yo se lo daba para sus
necesidades y la de sus hijos. No la dejó salir para decirle a la licenciada
Paola de Justicia Familiar que volvería a su domicilio de Luis G. Urbina 387,
colonia Francisco Villa. En otras palabras, aprovechándose de la falta de
carácter que tiene Lourdes, María de Jesús Hernández y Juan Manuel Partida
Montañez, la tienen secuestrada junto con mis dos pequeñitos, los cuales viven
un infierno sin merecerlo. Cuando vivían conmigo, yo dejaba que Lourdes
durmiera; yo les preparaba biberones, los cambiaba de pañales y estaba al
pendiente de que comieran comida. Hoy, Lourdes se duerme y no sabe de los
niños; ayer mismo me confesó que los niños no pudieron dormir, se la pasaron
llore y llore; María de Jesús la hermana no le ayuda ni en el día ni en la
noche con nada, pues ella se duerme agusto con el marido mariguano que tiene.
Por
eso ayer exploté tras escuchar los lamentos de mi hijo Gilbertito, quien pedía
el apoyo de su padre, ya que la mamá le estaba diciendo groserías; estaba yo en
la tienda y le decía en voz alta que este infierno estaba por terminar y cuando
ya me retiraba, sale El Juano, Juan Manuel Partida Montañez, el mariguano,
quien no es la primera vez que me amenaza con echarme la judicial si continuo
yendo a su casa; decidido a no permitirle una más, le señalé que si no tenía un
poco de vergüenza para dejar de fumar mariguana delante de mis dos pequeñitos;
a lo cual el sujeto, sumamente ofendido me comenzó a decir vieja chismosa,
maricón y acto seguido me retó a los golpes, a lo cual no le hice jalón porque
este sujeto quería que lo golpeara para demandarme ante la autoridad; lo bueno
es que les gané el arranque.
Quiero
insistir que los niños están ahí en el chiquero al cual los llevó su mamá
Lourdes, gracias a que Liliana Gómez lo está permitiendo; ella también es
responsable de lo que pasa con mis pequeñitos: están enfermos de gripa, tos, no
quieren comer porque les hace falta el apoyo de su padre; andan muy
desmejorados y con peso muy bajo, después de la última evaluación que les
hicieron en el DIF Estatal y el Centro de Justicia Familiar; ellos, en su inocencia, se sienten agusto
cuando nos ven conviviendo juntos, pero tan pronto me voy a casa, María de
Jesús y El Juano, se dedican a voltearla contra mí. Ya me cansé de estar
pidiéndole al gobierno que vigilen muy bien ese domicilio de Amapas 59, colonia
Los Pinos, donde tienen secuestrados a mis dos pequeñitos; yo desde este
momento los hago responsables de lo que pueda pasarles no solamente a ellos,
sino también a mi mujer María de Lourdes, la cual había mostrado interés por
regresar a su casa y resulta que hasta hace unas horas, ni el celular que le
acabo de comprar la dejaban contestar; estamos enfrentando a unos verdaderos profesionales
de la delincuencia; gobierno actúa, ¿no que te interesa la familia DIF estatal¿.
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